Monique Smith tiene 19 años, vive en Brooklyn, en Nueva York, y puede pasarse dos años en la cárcel por haber matado el hámster de su hermano el 19 de junio pasado. No sólo eso: quien la denunció fue su propio hermano.
Todo sucedió cuando, según las autoridades, Monique llegó a su casa y se encontró a su hámster muerto. La adolescente dio por hecho que su hermano Aaron lo había matado, y decidió inmediatamente su venganza: matar al hámster de Aaron. Así que lo agarró, lo tiró al suelo y luego lo lanzó por la ventana.
Pero Monique no contaba con la reacción de Aaron. Éste no se lió a mamporros con su ella —como, según los padres de ambos, es normal entre ambos— sino que llamó a la Asociación Estadounidense para la Prevención de la Crueldad con los Animales (ASPCA, según sus siglas en inglés). Ésta encontró al hámster muerto frente a la casa de los Smith, situada en el barrio de Bushwick, una zona de renta media-baja.
Según la autopsia, el animal murió por traumatismos, lesiones en el hígado y hemorragia cerebral. ASPCA decidió entonces denunciar el crimen. Y, como consecuencia, se abrió una investigación que duró 9 meses y que ha terminado con el arresto de Monique esta semana, aunque la joven ahora está en libertad provisional. En todo caso, lo peor es lo que le espera: la adolescente afronta una posible condena de dos años de cárcel y una multa de 5.000 dólares (3.500 euros).
Para el padre, Michael, "fue un accidente", que se ha sacado de madre. Paradójicamente, la 'estrella' del fútbol americano Michale Vick sólo fue condenado a 23 meses de cárcel—uno menos de los que le pueden caer a Monique— por dirigir una extensa red ilegal de peleas de perros.
Hoy comienza la elección de miembros del jurado, un proceso que puede llevar varios días. A continuación, se celebrará el juicio, que puede acabar mandando a Monique a la cárcel.
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