Las autoridades japonesas han declarado un "estado elevado de alerta" en la central nuclear de Fukushima Daiichi (nordeste del país) después del terremoto de 8,8 grados en la escala de Richter que sacudió este viernes al país, según informó el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA). El ministro de Industria, Banri Kaieda, ha advertido que podría producirse una pequeña fuga radiactiva en la central, duramente golpeada por el seísmo.
Según las autoridades, hasta el momento no se ha detectado ninguna fuga en las centrales nucleares de las regiones afectadas por el temblor. Un total de 11 reactores han cesado automáticamente su actividad durante el terremoto, según el ministerio de Industria.
Pero en Fukushima Daiichi, las autoridades niponas se disponían a liberar vapor radiactivo para hacer caer la presión que se ha elevado en un reactor de la central nuclear nº1 de Fukushima, ha precisado la agencia Kyodo. Un experto citado por el canal japonés NHK señaló que se trata de un "proceso habitual".
"Es posible que el material radiactivo en el reactor pudiese salir fuera, pero la cantidad que se espera sería pequeña", dijo el portavoz del Gobierno, Yukio Edano, en una rueda de prensa.
El ejército estadounidense ha acudido en ayuda de las autoridades niponas, según anunció la secretaria de estado de EEUU, Hillary Clinton.
"Las fuerzas del aire en Japón acaban de transportar un producto de enfriamiento muy importante sobre una de las centrales nucleares. Una de las centrales se ha visto en una situación muy difícil por el seísmo y carecía de medios de enfriamiento", aseguró, sin precisar de qué central se trataba. Según la agencia Jiji, sería Fukushima Daiichi.
Problemas en la refrigeración
Como medida de precaución las autoridades japonesas han decidido evacuar a miles de residentes de un área cercana al reactor nuclear, después de que el daño causado por el seísmo generara temores de una fuga radiactiva.
"Los residentes están seguros después de que aquellos en un radio de tres kilómetros fuesen evacuados y aquellos en un radio de 10 km permanecen en sus casas, así que queremos que la gente permanezca tranquila", aseguró el portavoz Edano.
Tras el terremoto, el Gobierno declaró el estado de emergencia en esta factoría por el fallo en uno de sus sistemas de refrigeración. En dos reactores de la planta se estropeó el sistema de refrigeración, así como los cuatro generadores de emergencia. Ello causó un descenso del líquido de refrigeración, algo que entraña el riesgo de una fusión nuclear en el peor de los casos, según expertos.
El combustible nuclear requiere de un enfriamiento continuo incluso cuando las instalaciones atómicas han dejado de funcionar, según la agencia nuclear de la ONU.
El OIEA aseguró en un comunicado que no se ha producido ningún escape de radiactividad de la planta atómica, que ha cesado su actividad. "El OIEA busca más detalles sobre la situación en Fukushima Daiichi y otras plantas de energía nuclear y reactores de investigación, incluyendo información sobre suministros de energía eléctrica, los sistemas de enfriamiento y la condición de los reactores", afirmó en un comunicado difundido en Viena.
No obstante, la prefectura de Fukushima ha asegurado que los niveles de agua en el reactor no están en valores críticos. El director del grupo de energía nuclear del Instituto de Economía y Energía de Japón, Tomoko Murakami, ha subrayado que "no existe ningún riesgo inminente de radiación en la planta nuclear".
La empresa Tokyo Electric Power (TEPCO)ya había advertido que la presión dentro del primer reactor de su planta nuclear Fukushima-Daiichi había estado subiendo, con el riesgo de una fuga de radiación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario