Recien llegado el verano, el Gobierno se inventa un nuevo impuesto,
sobre el aire acondicionado. La nueva figura fiscal, que grava los gases
fluorados con los que funcionan los aparatos de refrigeración, se ha
incluido en el paquete de subidas de impuestos que ha aprobado este
viernes el Consejo de Ministros, con los que se espera recaudar El
Gobierno espera recaudar al menos 4.690 millones de euros en términos
anuales.
Subida de tabaco y alcohol
Como se había anunciado, la nueva vuelta de tuerca fiscal eleva los gravámenes al alcohol, con un alza del 10%,
y al tabaco, según confirmó este viernes el ministro de Hacienda y
Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, en la rueda de prenda
posterior al Consejo de Ministros. Con esta medida el Ejecutivo espera
recaudar unos 700 millones de euros anuales. "Subimos los gravámenes de
la tributación sobre aquellos consumos como el alcohol y el tabaco, que
son los dos grandes consumos especiales que se deducían de la
presentación de estabilidad", señaló el titular de Hacienda.
El
ministro desveló que finalmente se subirá un 10% en el caso del alcohol,
que pasará de 8,30 euros por litro de alcohol puro a 9,13 euros por
litro, un incremento de 83 céntimos.
Dicha subida impositiva tendrá impacto en el sector de bebidas espiritusas, ya que, según apuntó, esta medida "no afectará ni al vino ni a la cerveza".
Asimismo, el tabaco también sufrirá un incremento impositivo
y se realizará, según ha explicado, una "recompensación de la
tributación", dándole más peso al tipo específico, que al 'ad valorem',
acercándose así a la tributación de la Unión Europea. En concreto, el
tabaco está gravado en el caso de los cigarrillos por tres impuestos
especiales diferentes: un impuesto específico de 19,10 euros por cada
mil cigarrillos, un impuesto 'ad valorem' del 53,1% del precio final y
uno mínimo de 123,97 por cada mil cigarrillos o de 132,97 euros por
cada mil cigarrillos cuando el PVP sea inferior a 188,50 euros
(alrededor de 3,77 euros para una cajetilla), por cada mil cigarrillos.
En el caso de la picadura de liar, el impuesto mínimo está
establecido en 85 euros por cada kilogramo o de 92 euros cuando tenga
un precio de venta inferior a 138 euros por kilo. El espcífico, en este
caso, es de 8 euros por cada kilo, mientras que el 'ad valorem' se
sitúa en el 41,5% del precio final.
Se trata del cuarto cambio fiscal sobre el tabaco aprobado por el Ejecutivo de Mariano Rajoy,
que a finales de diciembre ya elevó el impuesto especial que grava el
consumo de tabaco desde el pasado 1 de enero estableciendo un sistema de
'doble impuesto mínimo'.
El Estado recaudó 9.384 millones de
euros a través de impuestos especiales e IVA del tabaco en 2012, lo que
representa un aumento del 2,8% respecto a lo embolsado en 2011, según
informaron en fuentes del sector. Del total recaudado el pasado año, un
total de 7.475 millones corresponieron al Impuesto especial sobre las
Labores del Tabaco, un 3,94% menos, y los 1.909 millones restantes al
IVA, lo que supone un aumento del 1,52%.
El mercado de cigarrillos
ha registrado unas ventas de 763,96 millones de cajetillas hasta abril,
lo que supone un descenso del 14,1% respecto a un año antes, por las
que se facturó 3.139,5 millones de euros, un 7% menos, según los últimos
datos publicados por el Comisionado para el Mercado de Tabacos a los
que tuvo acceso Europa Press.
Frente a este retroceso, el tabaco
de liar creció un 46,4% en volumen, hasta 2,30 millones de kilos, con
un alza en valor del 67,7%, hasta 340,97 millones de euros, en un
entorno de crisis económica marcado por el enfriaiento del consumo.
Eliminación de deducciones a grandes empresas
También anunció el Gobierno modificaciones en el Impuesto de Sociedades.
En concreto la eliminación de algunas deducciones para las grandes
empresas, como la deducción por las rentas negativas obtenidas en el
extranjero a través de establecimientos permanentes. Montoro calculó que
el Estado podrá recaudar 3.650 millones por la eliminación de estas
deducciones a grandes empresas.
Montoro indicó que lo que no era admisible es que, actualmente, algunas grandes empresas tributaran por un tipo nominal del 5% en el Impuesto de Sociedades,
cuando el tipo efectivo está situado en el 30%. "No se puede admitir
que los grandes contribuyentes tuvieran de media tipos efectivos de
gravamen del 5%, y ahora se trata de homologarlo a los que es nuestro
entorno", subrayó el ministro, quien especifió que ya tendrá impacto en
el pago fraccionado que realizarán las empresas a finales de este año.
Montoro
atribuyó la caída de la recaudación de este impuesto tanto a la
desaceleración económica como a los "elementos definitorios" del mismo.
Así, dijo que con la eliminación de estas deducciones se acerca la
definición del Impuesto de Sociedades a lo que es "rango común" en la
mayor parte de los países de Europa donde, según apuntó Montoro, no
existen este tipo de deducciones y "no se pueden justificar".
Nuevo impuesto sobre los gases fluorados de efecto invernadero
Por su parte, la creación del nuevo impuesto sobre gases fluorados de efecto invernadero permitirá recaudar 340 millones de euros al año.
Sobre el nuevo gravamen ecológico, indicó que se enmarcará dentro de la
reforma energética que está preparando el Gobierno y añadió que gravará fundamentalmente los gases que emiten los aparatos de aire acondicionado.
Los
hidrofluorocarburos (HFC) se emplean principalmente como refrigerantes,
disolventes de limpieza y agentes para la fabricación de espumas; los
perfluorocarburos (PFC) se utilizan en la fabricación de
semiconductores, disolventes de limpieza y agentes para la fabricación
de espumas, y el hexafluoruro de azufre, en los equipos de conmutación
de alta tensión y la producción de magnesio. Concretamente, serán
contribuyentes los fabricantes de gases fluorados, los importadores o
adquirientes intracomunitarios de estos productos y los revendedores.
El tipo impositivo se establecerá en función del potencial de
calentamiento atmosférico (PCA) de los productos. Este nuevo impuesto
entrará en vigor en 2014.