El intendente reelecto de Canelones, Marcos Carámbula, se mostró satisfecho con la votación obtenida en su departamento, pero advirtió que los resultados electorales significan un "desafío enorme" para el FA, porque "pensábamos que el proyecto de izquierda estaba consolidado en el país y no es así".
Carámbula. Sostuvo que parte del voto en blanco tiene que ver con el desacuerdo con la ley (de alcaldías).
Entrevistado en el programa "Primera Voz" de 1410 AM LIBRE, que conduce Sonia Breccia, el jefe comunal canario sostuvo en primer término que "en Canelones se consolida el proyecto de la izquierda, porque cuando se habla de porcentajes se pierden de vista los números reales".
"En Canelones el FA obtuvo 163 mil votos, contra 70 mil votos del Partido Nacional, es decir, hay una diferencia de 90 mil votos en cifras reales. Ni hablar con respecto al Partido Colorado que tiene poco más de 29 mil votos", sostuvo el dirigente frenteamplista.
"Este es un departamento tradicionalmente colorado, de los partidos tradicionales, pero hoy la izquierda en Canelones tiene una diferencia de 90 mil votos sobre uno de los partidos y mucho más sobre el Partido Colorado. Aun sumados los dos partidos, la izquierda tiene 60 mil votos más que blancos y colorados juntos. Esa para mí es una primera gran lectura", reflexionó. "Lo otro importante es que conservamos la representación parlamentaria, porque tenemos 20 ediles, como teníamos desde el 2005", precisó el jefe comunal.
Carámbula también analizó la incidencia de los votos en blanco en su departamento. "Cada situación es distinta según el departamento, así que no opino sobre la realidad de Montevideo, e intento opinar sobre lo que ocurrió en Canelones. El voto en blanco sin duda tiene que ver en una parte con la gestión", admitió.
"Nosotros estamos en la mitad del camino de las obras en Canelones, con todas las dificultades que era salir adelante en esta intendencia. No tengo dudas en pensar que un porcentaje de ese voto en blanco tiene que ver con que no llegamos con la gestión en estos cinco años en materia de obras. La gente me ha dicho que hemos cumplido con una parte de las obras y a otra parte de las ciudades no ha llegado", puntualizó.
"Así que una parte de ese voto en blanco, que puede ser la diferencia entre el casi 53% que obtuvimos ahora y el 60% que tuvimos en 2005, tiene que ver con parte de las expectativas no cumplidas", señaló.
"Enorme desafío"
"A mi entender, lo otro tiene que ver directamente con una expresión ciudadana frente a la ley de descentralización y más en Canelones. Estos 160 mil votos que respaldaron al gobierno departamental tienen una diferencia significativa con quienes votaron en la elección local. En Canelones se votaban 29 municipios y tenemos 160 mil votos al candidato a intendente y 110 mil votos a los alcaldes locales". "Eso explica que de 29 juntas locales el FA tiene 18 y está peleando con los votos observados por la 19, pero en varias ciudades que ganamos a nivel departamental perdimos la alcaldía por esta diferencia en los votos", reflexionó Carámbula.
"Entonces, creo que parte del voto en blanco tiene que ver con que la gente no estaba de acuerdo con la ley, por aquella preocupación de mayor burocracia, los sueldos de los alcaldes, más gastos para el Estado, más pérdida de tiempo, más cargos, todo eso generó un imaginario en torno a la aplicación de la ley aunque yo sigo pensando que es una ley absolutamente transformadora que hizo que mucha gente expresara su rechazo o desconocimiento, votando al intendente pero con un voto en blanco por el alcalde local".
Consideró que a partir de estos resultados "hay un enorme desafío para la fuerza política; nosotros pensábamos que ya estaba consolidado el proyecto de izquierda en el país y no es así. A su vez, está la relación entre la gestión y la política y voy a hablar con muchísima pena de mis colegas. Perder Salto, Paysandú, Treinta y Tres, y estamos ahí con Florida, cuando esas gestiones significaron una mejora en la calidad de vida, en la infraestructura, en la participación de la sociedad, en compromiso social, como la gestión digital en Florida, y todo en sintonía con el gobierno nacional".
"Para mí hubo una disociación entre la gestión, la política y la sociedad. Ahí es donde tenemos que replantearnos muy profundamente a nuestra fuerza política, porque realmente el llamado de atención a esa desobediencia cívica tiene que ver con que no alcanza con la gestión de gobierno si no hay una construcción política y una fuerza política acorde a ser un partido de gobierno", opinó.
Finalmente, Carámbula hizo un llamado a la fuerza política para analizar los resultados departamentales, no solo desde la visión de cada sector sino desde el "colectivo frenteamplista".
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