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lunes, 25 de abril de 2011

Yemen sacudido por protestas mientras Saleh confunde sobre dimisión

Sanaa, 25 abr (PL) Opositores a Alí Abdulah Saleh intensificaron hoy las protestas en Yemen para exigir su renuncia, luego que el presidente generó dudas sobre su supuesta aceptación del plazo fijado por un plan subregional para ceder el poder.

Aunque la oposición aglutinada en los Partidos de la Reunión Conjunta (PRC) aceptó los términos de una iniciativa del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) Pérsico, manifestantes en las calles reclamaron la dimisión inmediata e incondicional del estadista.

Saleh, que gobierna Yemen desde 1978, declaró el domingo a un canal de televisión británico que no transferirá el mando del país a quienes describió como "rebeldes", pese a que había dicho el sábado que aceptaba el ultimátum dado por el CCG.

En ese sentido, reiteró que sólo traspasará la banda presidencial a quien resulte electo en las urnas, lo que haría dilatar la cesantía por la que presionan millones de yemenitas desde el inicio de las revueltas el 27 de enero pasado.

Al mismo tiempo, describió los esfuerzos para negociar su salida como un "golpe de Estado", y advirtió que elementos de la red Al-Qaeda se infiltraron en las demostraciones opositoras y ello podría tener "implicaciones peligrosas" para los países occidentales.

La propuesta del bloque de seis naciones árabes del Golfo Pérsico estipula que el mandatario transfiera el poder a su vicepresidente en un plazo no mayor de 30 días para que éste cree un gobierno de unidad encabezado por la oposición y convoque a elecciones en dos meses.

El partido gobernante Congreso General Popular (CGP) dijo que el jefe de Estado había aceptado renunciar dentro de 30 días a cambio de que se le concediera a él, su familia y varios de sus allegados inmunidad ante eventuales procesos judiciales, según el plan del CCG.

Además de la desconfianza de un sector de la ciudadanía respecto a las promesas del presidente, algunos opositores mostraron reservas ante la eventualidad de tener que compartir puestos gubernamentales con figuras vinculadas a Saleh durante el pretendido período de transición.

Las declaraciones del gobernante y del CGP parecieron no persuadir a sus adversarios para desistir de tomar las calles, a pesar del clima de intimidación que sufren a manos de las fuerzas de seguridad y grupos armados afines al mandatario, según denunciaron varios testigos.

El jefe opositor Yassin Noman reconoció no estar preparado para adherirse a un gabinete interino con el partido CGP, y otros líderes siguen descontentos con la idea de que Saleh termine 32 años de mandato sin responder por la muerte de más de 300 manifestantes.

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