La no emisión del documental ¿Monarquía o república? en TV-3 genera aún controversia. Fuentes próximas a la dirección de la cadena pública catalana explicaron ayer que la emisora prefirió no emitir la producción al comprobar que no respondía a la pregunta planteada en el título, sino que se centraba en el rey Juan Carlos I, atacaba su figura y trataba asuntos de su vida privada sin el suficiente rigor.
Tanto la televisión como los autores del documental, Montse Armengou y Ricard Belis -responsables de títulos como Els nens perduts del franquisme y El comboi dels 927-, aseguran que el debate sobre monarquía o república queda aparcado, pero que se retomará en una futura producción, lo que permitirá aprovechar los testimonios reunidos. Aun así, el reportaje se deberá reformular, porque las diferencias entre ambas partes son por ahora insalvables. Del documental, encargado hace un año, se han elaborado en el último mes tres versiones, pero la base del trabajo era la misma y continuaba sin convencer a los responsables de la cadena la semana pasada. El enfoque y el montaje de la cinta, que mezclaba entrevistas e imágenes históricas con caricaturas y gags de Polònia también impidió el acuerdo. Armengou y Belis explicaron ayer: "es un documental delicado sobre el que no hay precedentes". A pesar de estar afectados por la polémica, no creen que éste sea un caso de "censura", aunque opinan que su trabajo era emitible. El diputado de ERC Joan Tardà, entrevistado en el documental, polemizó al respecto en su blog al opinar: "Tras tantos años de silencios" todavía "prevalece el miedo sobre la profesionalidad". También la Comissió de la Dignitat organizó un acto en la plaza de Sant Jaume a favor de la República y para pedir su emisión.
Tanto la televisión como los autores del documental, Montse Armengou y Ricard Belis -responsables de títulos como Els nens perduts del franquisme y El comboi dels 927-, aseguran que el debate sobre monarquía o república queda aparcado, pero que se retomará en una futura producción, lo que permitirá aprovechar los testimonios reunidos. Aun así, el reportaje se deberá reformular, porque las diferencias entre ambas partes son por ahora insalvables. Del documental, encargado hace un año, se han elaborado en el último mes tres versiones, pero la base del trabajo era la misma y continuaba sin convencer a los responsables de la cadena la semana pasada. El enfoque y el montaje de la cinta, que mezclaba entrevistas e imágenes históricas con caricaturas y gags de Polònia también impidió el acuerdo. Armengou y Belis explicaron ayer: "es un documental delicado sobre el que no hay precedentes". A pesar de estar afectados por la polémica, no creen que éste sea un caso de "censura", aunque opinan que su trabajo era emitible. El diputado de ERC Joan Tardà, entrevistado en el documental, polemizó al respecto en su blog al opinar: "Tras tantos años de silencios" todavía "prevalece el miedo sobre la profesionalidad". También la Comissió de la Dignitat organizó un acto en la plaza de Sant Jaume a favor de la República y para pedir su emisión.
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