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miércoles, 9 de marzo de 2011

Las irregularidades del imperio de Nueva Rumasa

La situación de Nueva Rumasa se complica con cada paso que el grupo de empresas de la familia Ruiz-Mateos da para tratar de mejorarla. A la suspensión de pagos declarada este martes en dos de sus principales empresas, Dhul y Clesa, se suma ahora una serie de cartas que el grupo entregó el martes a los medios de comunicación. Los documentos forman parte de la correspondencia que la familia Ruiz-Mateos mantuvo con el Banco Santander en los últimos años y de ellos se desprende que el grupo engañó a los 5.000 inversores que adquirieron pagarés emitidos por la compañía.

Este hecho queda patente en una de las cartas, con fecha de 9 de febrero de 2009, enviada por José María Ruiz-Mateos al director general de riesgos de la entidad, Javier Peralta. "Quiero también que sepas que mucha de la publicidad y comentarios que de vez en cuando salen en los medios de comunicación, sobre inversiones y puestos de trabajo, forman parte del marketing de cara a la opinión pública, pues a la hora de la verdad, si lo analizas bien, cuando llevamos a efecto alguna operación mercantil, es porque recibimos más de lo que invertimos…”.

En la misma misiva enviada al banco presidido por Emilio Botín, Ruiz-Mateos aseguraba que “los tiempos no están para invertir, sino para recoger…a veces es bueno aparentar de cara a sostener un clima de confianza y seguridad ante nuestros proveedores y clientes”.

Precisamente, ese mismo mes de febrero el grupo inició su primera campaña de emisión de pagarés, con una rentabilidad garantizada del 8% anual y vencimiento a un año, una oferta muy por encima de lo que ofrecía el mercado en esos momentos.

La empresa justificaba esta operación en la necesidad de crecer. "Requerimos dinero de la gente porque vamos a adquirir varias empresas que harán mucho más fuerte el grupo”, aseguraba entonces. Pero ayer martes por la tarde, Nueva Rumasa reconocía en una nota de prensa que “quizás lo recaudado con estas emisiones [cuatro en total] no ha sido utilizado en su totalidad para la adquisición de nuevas empresas. Quizás parte de los fondos haya debido ser utilizado para paliar la repentina, incomprensible y contundente falta de comunicación y apoyo del banco”, en referencia al Santander.

El deterioro de la relación

Asimismo, la nota deja entrever que la relación entre ambas partes está ahora lejos de los buenos momentos que atravesaron en años anteriores. La buena sintonía comenzó a resquebrajarse en 2008, cuando el Banco Santander pidió a Nueva Rumasa que rebajara su nivel de endeudamiento. Ante la falta de respuesta efectiva por parte del grupo, la entidad decidió cortar las líneas de crédito en 2009 y fue entonces cuando los Ruiz-Mateos recurrieron de forma insistente al banco en petición de auxilio.

Una carta fechada el 22 de abril de 2010 recoge: “Querido Emilio. El bueno de tu padre, que en el cielo estará, fue inducido maliciosamente por alguno de sus colegas para felicitar al Gobierno por la desaparición del primer ‘holding’ familiar de España, y que actualmente es reconocido por todos que lo que hicieron fue una salvajada. Hoy recurrimos a ti”.

En otra misiva, del 10 de junio de 2010, se hacía alusión a las dificultades del grupo. “Querido Emilio, pese a lo mal que lo estamos pasando por la postura de tu Banco, quiero que sepas que hemos celebrado una misa en la capilla de mi casa pidiendo por tus intenciones para que consigas tus deseos”.

En un nuevo intento desesperado por lograr la financiación que necesitaban, Ruiz-Mateos asegura que se retirará en cuanto logre el dinero. “Emilio, por una vez te pido que hagas un acto de humildad y recibas a mis seis hijos varones (inmejorables): si sois capaces de llegar a un acuerdo de futuro, prometo firmemente que, seguidamente después, me retiro, sin dudar”.

Campaña contra Botín

Las decenas de cartas que los Ruiz-Mateos han hecho llegar a los medios de comunicación coincide con el anuncio del grupo de interponer una querella contra el presidente del Santander, Emilio Botín, al que culpan de la situación que atraviesan. El Santander y su filial Banesto son los mayores acreedores de Nueva Rumasa.

José María Ruiz-Mateos hijo acusó ayer al Grupo Santander de "cortarles el crédito", decisión de la que todavía "están evaluando los daños", y ha afirmado que van "a actuar de forma implacable contra Emilio Botín".

"Pensamos investigar todas y cada una de las causas que tienen abiertas, tipo Madoff o Banif", dijo Ruiz Mateos, que anunció también una campaña contra Botín que incluye la creación de unas plataformas de afectados contra el Santander.

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