En los tres primeros meses del año aumentó en 1.250 personas el número de autónomos extranjeros afiliados a la Seguridad Social, sumando así 200.182, lo que contrastó con la disminución de 14.660 de españoles en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
Según los últimos datos del ministerio de Trabajo, dos de cada tres autónomos extranjeros nuevos en ese periodo fueron chinos, 778 más que suman un total de 33.063, algo más de un tercio de los autónomos no pertenecientes a la Unión Europea (97.025).
De los 1,14 millones de extranjeros afiliados a la Seguridad Social, un 17% fueron autónomos al final de marzo. Además de los trabajadores de nacionalidad china, destacó también el número de rumanos (21.830), británicos (18.599), alemanes (13.622), italianos (13.176) y marroquíes (11.450).
Para la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) y la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), el incremento del número de trabajadores por cuenta propia extranjeros no hace otra cosa que "demostrar" la capacidad de este colectivo para soportar los efectos de la crisis.
"Aún es más necesario intensificar una actitud positiva de las administraciones públicas para fomentar este factor", sugirió el coordinador nacional del Área de Inmigración de UPTA, Eduardo Abad Sabarís.
Por su parte, el presidente de ATA, Lorenzo Amor, consideró "alentador" que los extranjeros opten por la vía emprendedora para sortear la crisis, al insistir en que España "necesita emprendedores". "Los autónomos extranjeros crecen a un ritmo cinco veces superior que los autónomos autóctonos", constató Amor.
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