Un total de 418.131 escolares catalanes estrenan la primera semana blanca este lunes, que se prolongará hasta el 4 de marzo, antes de la segunda oleada de alumnos --721.191--, mayoritariamente de Barcelona y su área metropolitana, que harán fiesta entre el 7 y 11 el de marzo.
Las actividades de nieve y esquí son las que mayor ocupación han alcanzado entre los alumnos, aunque éstas han sido reservadas, sobre todo, por las familias con más recursos, frente al resto de actividades, que han registrado mayor oferta que demanda --llegando incluso a anularse--, por lo que las casas de colonias han registrado un bajo nivel de ocupación.
Esta semana de fiesta trata de compensar el avance del curso del 15 al 7 de septiembre en una modificación del calendario escolar introducida por el ex conseller Ernest Maragall que el próximo curso será replanteada por la nueva consellera de Enseñanza, Irene Rigau.
Esta semana festiva se ha planteado desde el Govern como cinco días sin actividad lectiva en los que las asociaciones de padres y madres (Ampas) o, en su defecto, los ayuntamientos han tenido que organizar actividades para los alumnos.
Según las Ampas, el 90% de las familias asumirán el cuidado de los niños, ya que no les llevarán a las actividades de ocio alternativas programadas por las casas de colonias.
Cada servicio territorial he tenido que decantarse por una de las dos semanas festivas después de escuchar a los consejos escolares de la zona, lo que ha dividido Catalunya entre la mayoría de comarcas que han optado por la primera semana --con el 36,7% de los alumnos-- y una minoría de comarcas --con mayor concentración de alumnos, del 63,3%-- que ha elegido la segunda.
En Lleida, Girona y Tarragona, los alumnos harán vacaciones mayoritariamente en esta primera fase, salvo las comarcas del Solsonès, Priorat, Baix Camp, Conca de Barberà, Alt Camp, Tarragonès y Baix Penedès, que las harán la segunda semana junto a la mayoría de la provincia de Barcelona, después de que el alcalde de la capital catalana, Jordi Hereu, decretara festivo el 7 de marzo.
Precisamente en la provincia de Barcelona es donde mayor división hay, ya que en el Barcelonès, Alt Penedès, Garraf, Baix Llobregat y Vallès Occidental se hará fiesta la segunda semana frente a las comarcas de la Anoia, Bages, Vallès Oriental, Maresme, Osona y Berguedà, que empiezan este lunes.
Ayudas recortadas
En enero, la consellera Rigau anunció a las familias y ayuntamientos el recorte del 70 por ciento de los fondos destinados a la organización de actividades para la semana blanca, pasando de los 800.000 euros planteados por su precedesor, Ernest Maragall, a 240.000 euros.
Este recorte dejó un margen de entre dos y tres euros de ayuda por alumno, aunque no todos han solicitado esta subvención.
De hecho, más de más de 700 ampas --137 de la ciudad de Barcelona-- han solicitado ayudas a la Generalitat para organizar las actividades de la semana, mientras que solamente unos 150 ayuntamientos han pedido estas subvenciones.
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