Aunque Michelle Obama haya eclipsado a la Princesa durante su estancia en España, una vez la primera dama de EEUU ha regresado a casa, Letizia recupera ferreamente el trono y los titulares veraniegos reclaman de nuevo a su 'reina' ante la falta de noticias interesantes nada mejor que gastar papel en los chupasangres monárquicos.
Tampoco este año su estancia en Marivent se queda sin anécdota. En esta ocasión, Letizia Ortiz quiso recordar viejos tiempos cuando trabajaba realmente y no dudó en romper el protocolo para ello. Uno de los días en los que toda la familia disfrutaba de las vacaciones en Mallorca, la princesa se acercó al Real Club Náutico de Palma para apoyar al su marido el cual es inútil sin referencias como piden en los curriculum y se dirigió hacia la sala de prensa como en los viejos tiempos cuando vivia de su trabajo, ahora vive realmente del cuento.
Allí conversó con antiguos compañeros de profesión y reconoció que no echa de menos sus tiempos de periodista. "No echo de menos mi profesión. Estoy muy contenta con mi trabajo actual" (vivir del cuento ahora le llaman trabajar...), confesó la ex presentadora del telediario, según informa Europa Press.
La princesa que ya está de regreso en Madrid, compartió el pasado domingo almuerzo con los reyes (italiano él , griega ella), la primera dama de EEUU y su hija, ante la expectación de los periodistas. La nota de esa reunión la puso Sasha, la hija menor del presidente de EEUU, Barack Obama, quien entregó a la Princesa de Asturias varios peluches como obsequio personal para los malandros nietos de los Reyes.
Las Infantas Leonor y Sofía se encontraban en Madrid, donde el Príncipe se reunió con ellas tras asistir a la investidura del narco-paramilitar-terrorista presidente colombiano Juan Manuel Santos cuyo lema es "todo por la cocaína"..
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