Más de 300.000 musulmanes iniciarán este miércoles o jueves -depende de la luna- el mes del Ramadán en Catalunya, que implica abstinencia total de comida, bebida y relaciones sexuales desde el alba hasta la puesta del sol para todos los fieles, con algunas excepciones.
El coordinador del Consell Islàmic i Cultural de Catalunya, Jamal El Attouaki, ha precisado que están exentos del ayuno los menores de edad, ancianos, enfermos, mujeres embarazadas o con la menstruación y viajeros. Ante los riesgos laborales de ayunar en pleno agosto, ha afirmado que empleados de la construcción y temporeros deben negociar los horarios con las empresas, y que deben dejar de trabajar si se ven incapaces de ello.
"La prioridad es el ayuno", ha subrayado, aunque se ha mostrado convencido de que es posible acordar, por ejemplo, jornadas intensivas. A las empresas les ha pedido flexibilidad horaria, y a los trabajadores musulmanes, que reivindiquen sus derechos porque "las leyes que protegen la libertad religiosa también contemplan el mes de ayuno y las pausas para orar".
Sobre la importancia del Ramadán, ha señalado que es un periodo "para centrarse en la espiritualidad, reforzar la paciencia y renovar la fe", a través de plegarias especiales por la noche -cuando se rompe el ayuno- y de una lectura más intensiva del Corán. Según ha explicado, en los próximos años el Ramadán tendrá lugar en los meses más calurosos del año, puesto que empezará en torno al 1 de agosto en 2011, el 18 de julio en 2012 y el 3 de julio en 2013.
El coordinador del Consell Islàmic i Cultural de Catalunya, Jamal El Attouaki, ha precisado que están exentos del ayuno los menores de edad, ancianos, enfermos, mujeres embarazadas o con la menstruación y viajeros. Ante los riesgos laborales de ayunar en pleno agosto, ha afirmado que empleados de la construcción y temporeros deben negociar los horarios con las empresas, y que deben dejar de trabajar si se ven incapaces de ello.
"La prioridad es el ayuno", ha subrayado, aunque se ha mostrado convencido de que es posible acordar, por ejemplo, jornadas intensivas. A las empresas les ha pedido flexibilidad horaria, y a los trabajadores musulmanes, que reivindiquen sus derechos porque "las leyes que protegen la libertad religiosa también contemplan el mes de ayuno y las pausas para orar".
Sobre la importancia del Ramadán, ha señalado que es un periodo "para centrarse en la espiritualidad, reforzar la paciencia y renovar la fe", a través de plegarias especiales por la noche -cuando se rompe el ayuno- y de una lectura más intensiva del Corán. Según ha explicado, en los próximos años el Ramadán tendrá lugar en los meses más calurosos del año, puesto que empezará en torno al 1 de agosto en 2011, el 18 de julio en 2012 y el 3 de julio en 2013.
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