Miquel Siguan, psicólogo de la lengua, precursor de la inmersión lingüística, modelo que trajo de la provincia canadiense de Quebec y que se acabaría aplicando en el sistema escolar catalán, ha fallecido en Barcelona a la edad de 92 años.
Siguan murió el sábado en la Clínica Sagrada Familia de la capital catalana en donde estaba ingresado y su capilla ardiente quedará instalada hoy en el tanatorio de Sant Gervasi, según fuentes familiares.
Creador de la pionera Facultad de Psicología de la Universidad de Barcelona (UB), Siguan será enterrado mañana lunes en el cementerio de Sant Gervasi.
Doctor Honoris Causa por las universidades de Ginebra, País Vasco, Sevilla y Autónoma de Barcelona, Siguan recibió en 1988 la Cruz de San Jordi, máximo galardón de la Generalitat de Cataluña.
Dedicó una buena parte de su trayectoria profesional a promover la enseñanza de lenguas integrando perspectivas filosófica, psicolingüística y pedagógica en el marco de una reflexión y acción que lo llevaron a defender el potencial de la educación multilingüe en procesos de comprensión intercultural y promoción de la paz.
Autoridad lingüística internacional, en la década de los años 80 y 90 Siguan se convirtió en asesor de la Unesco y la Comisión Europea en materia de contacto entre lenguas.
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