Argentina procura evitar que se construya una represa en un afluente del limítrofe río Uruguay y actuará contra dos empresas que la impulsan, una de ellas del financista estadounidense George Soros, advirtió este jueves el canciller Héctor Timerman.
"Argentina no va a convalidar (la represa). Haremos todas las acciones legales necesarias para evitar que se avance en la construcción de una represa que puede ser violatoria del medioambiente y del derecho internacional", dijo Timerman en rueda de prensa en la cancillería.
El gobierno argentino "está decidido a actuar contra dos empresas que van a afectar el ecosistema", dijo el ministro, y precisó que se trata de las firmas "Copra, que pertenece a José Aranda, vicepresidente y accionista del grupo Clarín, y Adecoagro, del financista estadounidense George Soros".
El gobierno de Cristina Kirchner está duramente enfrentado con el grupo Clarín, la empresa de multimedios más poderosa de Argentina.
Timerman dijo que le notificó del tema este jueves a su colega uruguayo, Luis Almagro, con quien se reunirá en las próximas semanas.
"Hacemos esta denuncia ahora porque estamos a pocas semanas del inicio de las obras, lo que colocaría a Argentina como violatoria del tratado (binacional) del río Uruguay" de 1975, advirtió Timerman.
Ambos países vienen de atravesar un prolongado conflicto a raíz de la instalación en la orilla uruguaya de ese río de una planta de celulosa, a la que Argentina considera contaminante y por la cual denunció a su vecino por violar el tratado binacional ante la Corte Internacional de La Haya.
La represa proyecta construirse en la provincia de Corrientes (nordeste), sobre el arroyo Ayuí Grande, que desemboca en el río Miriñay, a su vez afluente del río Uruguay, frontera natural con Uruguay.
Según el canciller, desde 2008 el gobierno federal viene reclamando información a la gobernación de Corrientes para estudiar el posible impacto ambiental, pero ante la falta de respuesta "estamos actuando de oficio", por lo que no descartó acciones contra esa provincia.
Si se construye la represa, se formará un lago artificial sobre unas 8.000 hectáreas "con el único propósito de proveer agua a dos emprendimientos arroceros privados", denunció el ministro.
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