Militares ecuatorianos apoyan evacuación por inundaciones en Amazonía

Quito, 24 jul (PL) Las Fuerzas Armadas de Ecuador apoyan la evacuación y asistencia de al menos unas mil 200 familias afectadas por inundaciones provocadas por el desbordamiento de ríos en las provincias amazónicas de Napo y Sucumbíos. El Comité de Operaciones de Emergencia (COE) decretó la alerta amarilla por la temporada invernal en la provincia de Napo, donde fueron afectados sectores como Arosemena Tola, Puerto Napo, Chonta Punta, El Chaco y El Salado. Ante esta emergencia, las Fuerzas Armadas han realizado acciones preventivas con las familias, apoyan al personal civil en las primeras tareas de evacuación y colaboran en la elaboración y entrega de raciones alimenticias en las provincias afectadas. Por otra parte, los desbordamientos de los ríos Putumayo y San Miguel, en la provincia de Sucumbíos, afectan a unas mil 200 familias, que residen en el límite fronterizo entre Ecuador y Colombia, y han ocasionado hasta el momento cuatro muertos. Las crecidas, que empezaron la madrugada del jueves, causan hasta el momento cuatro personas ahogadas, una en Ecuador y tres del lado colombiano. El director de la Secretaría de Gestión de Riesgos de la provincia Sucumbíos, Víctor Carrera, confirmó la muerte de un campesino ecuatoriano y del lado colombiano tres adultos mayores fueron llevados por la corriente, cuando estaban en sus casas. El COE declaró al cantón Putumayo en estado de emergencia con alerta roja, coordinan acciones para solventar las necesidades de 37 familias refugiadas en albergues y colaborar con el resto de afectados que se niegan a ser evacuados de los sitios de peligro. Más de mil 200 viviendas quedaron inhabitables, y sus propietarios no solo se quedaron sin hogar, sino que perdieron además sus sembradíos de maíz, arroz, cacao, plátano y yuca, así como también su ganado, gallinas y borregos. Las autoridades de las dos provincias mayormente afectadas por la crecida de los ríos que la atraviesan se encuentran movilizadas para brindar protección a la población, evitar nuevas víctimas y daños mayores en los territorios amazónicos inundados.