En 1993, la joven inmigrante ecuatoriana Lorena Bobitt se convirtió en una de las personas más célebres y controvertidas de EEUU después de cortar el pene a su marido como venganza por haber sido violada aquella misma noche. Casi 18 años después, Catherine Kieu Becker, una mujer del sur de California, ha emulado a Bobitt después de haber drogado a su esposo, según ha informado la policía del condado de Orange.
El marido de Becker empezó a sentirse mareado y soñoliento el pasado lunes por la noche, después de tomar la cena, a causa de una sustancia que la presunta agresora añadió a su plato. "La víctima se tumbó y cuando se despertó estaba atado a la cama. Su esposa le estaba quitando la ropa. La sospechosa agarró el pene de la víctima y lo cortó", reza el informe de la policía local sobre los hechos.
Quizás para evitar que a su marido le fuera reimplantado su miembro viril a través de una operación, tal como sucedió con John Bobitt, Becker arrojó el pene a la trituradora del fregadero y lo puso en marcha. La víctima, de 51 años, se encuentra hospitalizada en el UCI Medical Center, situado en la ciudad de Orange, donde fue operado de urgencia. Su estado es crítico a causa de la hemorragia producida por la amputación.
Becker, de 48 años, se encuentra bajo arresto y ya le han sido imputados varios cargos, entre ellos los de torturas, mutilación con agravante, secuestro, asalto con un arma mortal, abuso doméstico y la administración de una droga para cometer un delito.
De momento, no se conocen las razones que llevaron a la mujer a cometer la acción criminal. Cuando los agentes de policía llegaron a la casa de la pareja tras una llamada al 911 de urgencia, Becker se limitó a decir que su marido "se lo merecía", de acuerdo las declaraciones del teniente Jeff Nightengale. El matrimonio estaba en proceso de divorcio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario