No acostumbra Pep Guardiola a los triunfalismos estériles. Tras la derrota del Real Madrid ante el Sporting y la victoria azulgrana en El Madrigal tampoco fue el de Santpedor quien lanzó las campanas al vuelo. Y aunque afirmó que se trató de un "grandísima victoria" aseguró que pese a haber aumentado a ocho puntos su ventaja con el Real Madrid se equivocarían si dieran la Liga por ganada.
"Ocho puntos es una buena ventaja, pero estamos compitiendo con un rival muy fuerte con el Real Madrid. Si con ocho puntos de ventaja a ocho jornadas ya te crees campeón sólo puedes perder la Liga. Hemos cogido la mejor ventaja del año, pero sabemos que Real Madrid hasta el final va a luchar", explicó.
"No me entusiasma que los aficionados lo celebren ya porque es una falta de respeto al rival, en este caso el Madrid. Las ligas se ganan cuando se han ganado. La ventaja ahora es mayor pero les he dicho a mis jugadores que lo que le ha pasado con el Sporting al Real Madrid nos puede pasar a nosotros la próxima semana. Ahora mismo sólo la podemos perder si nos despistamos", agregó.
Además, Guardiola se congratuló del buen juego de sus futbolistas "porque hemos ganado a un equipo fantástico, que hace un gran fútbol y ha habido paradas fundamentales de Víctor, que han sido decisivas. Es una grandísima victoria", recalcó.
Al margen del partido, Guardiola fue cuestionado por las declaraciones que realizó a la RAI, en las que indicaba que su etapa como técnico del Barcelona se estaba acabando. El técnico explicó que concedió esa entrevista al Brescia "por que el afecto que le tengo es muy grande" y porque celebraban su centenario, aunque señaló que habían pactado que no se emitiría. "Me pidieron hacer unas preguntas y les respondí por educación".
"Puede que sea muy joven y en un futuro aprenderé, no cumplieron lo que se había pactado. Yo la reflexión que hice es que cuando un entrenador lleva cuatro años siempre está mas cerca de dejarlo que de seguir. Yo me pasé de tonto y él de listo. Ellos decían que no iba a salir y salió", señaló.
Sobre su futuro en el club, Guardiola dijo que salvo en el Manchester United y el Arsenal, en los grandes clubes "hay pocos entrenadores que duren tres o cuatro años, es difícil. La reflexión que siempre he hecho es que cuando llevas cuatro estás más cerca de acabar. Lo dejaré cuando no tenga tanta fuerza, pasión y vea que esto no va. Esa es la reflexión que hice al prestigioso periodista de la RAI", concluyó.
Garrido lamenta las ocasiones perdidas
Por su parte, Juan Carlos Garrido, técnico del Villarreal, lamentó que su equipo no fuera capaz de aprovechar ninguna de las tres claras ocasiones de gol de las que dispuso. "Teníamos mucha ilusión en poder sumar en este partido. Lo hemos intentado pero no se ha transformado en la posesión del balón, pero con todo eso, tuvimos tres ocasiones de gol clarísimas, que en un partido de este nivel, al menos una tiene que ser gol", razonó.
"En la primera parte, con 0-0, Giusepe (Rossi) tiene dos muy claras ante Valdes, y Cazorla en el tramo final otra, y nos quedamos sin ese gol. El Barcelona tuvo mucha posesión pero no ha tenido muchas ocasiones de gol", prosiguió.
Al respecto de la polémica suscitada por las posibles manos de Piqué en el gol, el técnico valenciano señaló que todo el mundo que lo ha visto por televisión le han dicho que sí lo son, aunque tampoco quiso darle mayor relevancia. "Cuando un equipo gana hay que felicitarlo, pero creo que hemos merecido el empate", finalizó.
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