Volvió la esperanza a Conchillas. Entre los pobladores de la pintoresca localidad coloniense de casi mil habitantes, existe moderado optimismo. Montes del Plata, dijo que Punta Pereyra es el sitio que se estudiará para su planta de celulosa.
La empresa inicia el estudio de factibilidad para una planta de celulosa que supone una inversión de US$ 1.500 millones, mayor que la de Botnia. Conchillas había sufrido la alegría primero y luego la decepción de un proyecto similar de la española Ence que se frustró.
Una minuciosa investigación de expertos uruguayos y extranjeros, llegó a la conclusión, luego de considerar otros lugares en los departamentos de Río Negro, Tacuarembó y Durazno, que Punta Pereyra era una zona a explorar más a fondo para este emprendimiento.
La empresa formada en partes iguales por la sueco-finlandesa Stora Enso y la chilena Arauco, adquirió la mayoría de los activos de Ence, alcanzando de este modo un patrimonio por 235 mil hectáreas.
AGONÍA. La espera por el proyecto de Ence fue larga y cada día que pasaba aumentaba la incertidumbre y el desánimo entre los vecinos. La ilusión de prosperidad se esfumó cuando la empresa española abandonó sus planes en Uruguay. Luego vendió sus activos a Stora Enso y a Arauco.
Después de haber dado a conocer un ambicioso proyecto, los españoles se fueron de la noche a la mañana, dejando tantas o más heridas que cuando tomaron una decisión similar en Fray Bentos.
Por el camino quedaban los sueños de la gente, que ya había comenzado a preparar sus casas para albergar a los futuros trabajadores que prometían transformar el pueblo en una verdadera romería.
Ni hablar de aquellos que invirtieron todos sus ahorros en dotar de servicios a este "olvidado" pueblo con costas al río de la Plata.
Viejo esplendor. Sus habitantes añoraban revivir lejanas épocas de esplendor, contadas por padres y abuelos en largas sobremesas o enfrente de los vestigios de un viejo muelle, testigo de una época de oro.
Conchillas fue en el siglo XIX, la cantera elegida por la compañía inglesa Walter & Co. Ltd para abastecer de arena y piedra a gran parte de Buenos Aires. El puerto de la capital argentina es sólo una muestra de las construcciones que se hicieron con la excelencia de los materiales uruguayos.
Trabajadores de las más diversas nacionalidades llegaron y forjaron su futuro en este rincón de Colonia.
Descendientes con apellidos ingleses, edificaciones de piedra con techos a dos aguas y un viejo buque hundido convertido en patrimonio histórico, son la prueba tangible de un pasado que prometió volver.
REACCIONES. Ricardo Fernández, habitante del lugar, dijo que en la zona "hace falta trabajo, por lo menos para la juventud que se nos está yendo al extranjero; en el pueblo van quedando los jubilados y los empleados públicos".
Sostiene que la deserción de Ence "achicó a mucha gente, porque hubo quienes invirtieron todos sus capitales, incluso en hoteles".
Dice que el pueblo "revivió" con este anuncio de Montes del Plata, "porque la gente estaba muy asustada y decía: `si se acaba esto, se acaba todo`".
Alexandra, trabaja en un reparto de comestibles, un rubro que se vería notoriamente beneficiado con la realización de las obras. En diálogo con El País, dijo que la noticia de una nueva planta en Punta Pereyra los puso "contentísimos por todo lo que supone para el pueblo". Ahora habrá que ir pensando en "prepararse nuevamente" para afrontar un nuevo escenario.
A pocos metros de allí, detrás de un mostrador, José Germán Lacava calificó la noticia "como hermosa, mejor imposible, más para quien tiene negocio". En este y todos los almacenes de Conchillas, la noticia "es bienvenida" y cambió el ánimo de los pequeños empresarios.
"Los muchachos y las señoras, todos están contentos" dijo el comerciante de 57 años.
OBRA EJECUTADA. Un consorcio argentino inició los trabajos para Ence en abril de 2008 y luego de casi dos años y más de 2.700.000 metros cúbicos de tierra movidos, está finalizando la primera fase sobre una plataforma de 210 hectáreas.
El predio en total sobre el Río de la Plata cuenta con poco más de medio millar de hectáreas. El trabajo realizado es el mayor movimiento de suelos en la historia del país, después de la represa de Salto Grande.
En la actualidad trabajan 150 personas en la zona y de confirmarse definitivamente la inversión de Montes del Plata, el número de operarios se incrementará vertiginosamente hasta llegar a cinco mil operarios, tal como ocurrió con Botnia en Fray Bentos.
Tres generaciones, un solo sentir
Nazaret Adan. Estudiante. "La noticia la vivimos con felicidad, recuperamos la esperanza. Es una oportunidad para los jóvenes que ahora nos iremos a estudiar pero volveremos hechos profesionales para trabajar y vivir acá.
Fabián Almada. Ex presidente de la junta local de Conchillas.
"Para la gente de Conchillas que se haga esta obra, es una alegría muy grande. Actualmente hay entre 30 y 40 personas que viven de este emprendimiento. La desazón con los españoles fue grande. Me molestó que nos mintieran y vinieran a vendernos espejitos de colores.
Rodolfo Telechea. Adulto mayor
"La gente está contenta, ahora vemos el futuro con esperanza. Había muchos proyectos de casas y alquileres que habían quedado truncos. Los comentarios habían generado mucha incertidumbre y el pueblo lo sintió en lo anímico".
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