El Supremo Tribunal Federal informó su decisión de extradición a los ministerios de Justicia y Relaciones Exteriores para que las policías de Brasil y Argentina coordinen el operativo de traslado del torturador uruguayo que será juzgado en Buenos Aires. El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil dio esta semana un nuevo paso para concretar la extradición a Argentina del coronel uruguayo Manuel Cordero, al informar de su decisión al Ministerio de Justicia y comunicar oficialmente al Ministerio de Relaciones Exteriores para que pregunte a Argentina cuándo irá a buscar al militar.
Cordero finalmente será juzgado en Argentina por el secuestro de menores durante el denominado Plan Cóndor, en el que las dictaduras del Cono Sur coordinaron el accionar represivo fuera de sus territorios para exterminar toda oposición a los regímenes militares, cometiendo las peores violaciones a los derechos humanos.
El coronel Cordero que también había sido pretendido por el juez Luis Charles en Montevideo será el primer militar uruguayo extraditado a Argentina, cuya Justicia federal realizó requisitorias desde los años 80, que reiteró tras declarar inconstitucionales indultos y leyes que beneficiaban a criminales de lesa humanidad.
NO FUE AL MÉDICO
El militar, que había fugado de Uruguay en 2004, extendió durante cuatro años el pronunciamiento de la Justicia brasileña interponiendo distintas argucias jurídicas y apelando a su presunta enfermedad cardíaca, gracias a la cual logró que le otorgaran la prisión domiciliaria en la ciudad de Santana do Livramento.
Cordero permanece de hecho bajo libertad ambulatoria desde mayo del presente año; sin embargo no se realizó en ese período los chequeos médicos y las intervenciones quirúrgicas a que había aludido para que lo sacaran de la prisión en la Brigada Militar Nº 2 del estado de Río Grande del Sur.
Por el contrario, distintas denuncias de prensa y videos mostraron a Cordero fumando y corriendo por la ciudad fronteriza, lo que determinó que el militar fuera citado el 23 de noviembre a un examen médico forense al que no concurrió, por lo que su extradición se concretaría a pesar de futuros alegatos de salud.
DETENCIÓN Y TRASLADO
El STF remitió este miércoles 16 de diciembre una nota al Ministerio de Justicia para que informe a la Jefatura de la Policía Federal de Brasil sobre la definitiva decisión del máximo órgano judicial de ese país, por la que el 6 de agosto se otorgó la extradición de Cordero a Argentina.
En forma simultánea, en la misma fecha se envió otro escrito a Itamaratí para que la Cancillería brasileña se comunique con la Embajada de Argentina en Brasilia a efectos de establecer la fecha en la que ese país dispondría del militar uruguayo para su juzgamiento en Buenos Aires. Las dos comunicaciones dispuestas por el Supremo Tribunal Federal implican que la Policía Federal brasileña deberá permanecer atenta a un eventual intento de fuga del militar uruguayo, proceder oportunamente a su detención y coordinar con la Policía Federal argentina el operativo del traslado.
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