El Gobierno vasco pondrá en marcha un gran Pacto Social para la Inmigración con el que espera implicar en la lucha contra la xenofobia al conjunto de la sociedad de Euskadi, donde se calcula que viven cerca de 145.000 inmigrantes, lo que supone el 6,6% del total de la población.
La consejera vasca de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, ha realizado este anuncio durante la clausura este martes en San Sebastián de un Curso de Verano de la Universidad del País Vasco dedicado a las políticas europeas de inmigración.
Zabaleta ha explicado que este gran pacto, que se pondrá en marcha en octubre, dotará al País Vasco de un marco de referencia para impulsar, movilizar, involucrar y crear un clima de confianza en todos los estamentos sociales.
Para ello, un comité de expertos en el ámbito de la inmigración fijará las bases estratégicas y de actuación entre todos los implicados.
Gemma Zabaleta ha precisado que este foro deberá además impulsar políticas activas para los próximos años y, en definitiva, poner en marcha un proceso de cambio para la convivencia en la sociedad vasca.
La consejera ha expresado su convencimiento de que impulsar un pacto de estas características es ahora "más importante que nunca" porque "el eje de las políticas públicas debe bascular desde la acogida hacia la integración, convivencia, gestión de la diversidad e igualdad de derechos laborales y sociales".
Según datos facilitados por el Gobierno vasco, en Euskadi residen casi 145.000 inmigrantes, a los que habría que añadir otros 35.000 que ya tienen la nacionalidad española.
La misma fuente ha precisado que el flujo mayor de extranjeros llegó en el bienio 2005-2006 y, desde entonces, el número se ha estabilizado.
El país de origen mayoritario es Rumanía (11,2%), seguido de Marruecos (10,08%) y Colombia (8,4%), mientras que en el extremo contrario están Moldavia, República Democrática del Congo y Guinea.
Por sexos, el 51,4% son hombres y el 48,6% mujeres, precia la misma fuente,
Zabaleta ha hecho un llamamiento a combatir expresiones "habituales y arraigadas que sólo contribuyen a perpetuar prejuicios sobre los inmigrantes", al tiempo que ha destacado que en estos tiempos de crisis económica es necesario "establecer, a modo de semáforos, las luces rojas de la decencia y el respeto a la diversidad".
Frente a esto, la consejera ha destacado que los inmigrantes que recalan en Euskadi, donde se registra uno de los niveles más bajos de nacimientos, contribuyen a rejuvenecer una sociedad muy envejecida e incrementan también el potencial de empleo dado que 147.800 extranjeros, incluidos también los nacionalizados españoles, tiene entre 16 y 66 años.
Zabaleta ha abogado además por impulsar la colaboración interinstitucional para potenciar la integración dentro de un pacto en el que estarán representados partidos, organizaciones sociales, empresariales y sindicales, así como universidades y medios de comunicación.
La consejera ha hecho un llamamiento especial a la implicación de los medios de comunicación que deberían, a su entender, dotarse de un "código de autorregulación" para que "la pedagogía de la verdad sea el paradigma del comportamiento mediático y evitar que se instale la sospecha o criminalice por el mero hecho de ser inmigrante".
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