Santiago de Chile, 18 jun (PL) La pluma de ceniza volcánica derivada de la erupción del complejo Puyehue-Cordón Caulle regresó a territorio chileno, tras desplazarse por varios países de Suramérica y Oceanía.
El desprendimiento de las cenizas ocasionó un verdadero caos en la navegación aérea en las dos últimas semanas y obligó a la cancelación de decenas de vuelos en Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Uruguay, Perú, Australia y Nueva Zelanda.
Sin embargo, el jefe del centro de análisis de la Dirección Meteorológica, Jaime Leiton, dijo que la concentración de material piroclástico ha perdido importancia.
Paralelamente, las autoridades chilenas determinaron bajar el nivel de alerta del proceso eruptivo de seis a cinco (de ocho posibles), al descender la columna de humo desde los 12 kilómetros de altura que presentaba hasta tres kilómetros.
En concordancia con ello se flexibilizaron las medidas de evacuación en comunas de las regiones de Los Ríos y Los Lagos, en cuya frontera común se encuentra el Puyehue-Cordón Caulle, a unos 900 kilómetros al sur de esta capital.
El ministro de Minería y Energía de Chile, Laurence Golborne, explicó, empero, que en las inmediaciones del complejo volcánico se mantiene la alerta roja, por lo que unas 300 personas deberán permanecer aún evacuadas.
Apuntó además el director del Servicio Nacional de Geología y Minería, Enrique Valdivieso, que el macizo podría comenzar a expulsar lava, aunque esta sería una buena señal porque significaría que ha liberado toda su energía.
La última erupción del Puyehue Cordón-Caulle, de unos dos mil 240 metros de altura, había tenido lugar en 1960, luego del megasismo de 9,5 grados de la ciudad de Valdivia, considerado el de mayor magnitud en la historia de la humanidad.
El desprendimiento de las cenizas ocasionó un verdadero caos en la navegación aérea en las dos últimas semanas y obligó a la cancelación de decenas de vuelos en Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Uruguay, Perú, Australia y Nueva Zelanda.
Sin embargo, el jefe del centro de análisis de la Dirección Meteorológica, Jaime Leiton, dijo que la concentración de material piroclástico ha perdido importancia.
Paralelamente, las autoridades chilenas determinaron bajar el nivel de alerta del proceso eruptivo de seis a cinco (de ocho posibles), al descender la columna de humo desde los 12 kilómetros de altura que presentaba hasta tres kilómetros.
En concordancia con ello se flexibilizaron las medidas de evacuación en comunas de las regiones de Los Ríos y Los Lagos, en cuya frontera común se encuentra el Puyehue-Cordón Caulle, a unos 900 kilómetros al sur de esta capital.
El ministro de Minería y Energía de Chile, Laurence Golborne, explicó, empero, que en las inmediaciones del complejo volcánico se mantiene la alerta roja, por lo que unas 300 personas deberán permanecer aún evacuadas.
Apuntó además el director del Servicio Nacional de Geología y Minería, Enrique Valdivieso, que el macizo podría comenzar a expulsar lava, aunque esta sería una buena señal porque significaría que ha liberado toda su energía.
La última erupción del Puyehue Cordón-Caulle, de unos dos mil 240 metros de altura, había tenido lugar en 1960, luego del megasismo de 9,5 grados de la ciudad de Valdivia, considerado el de mayor magnitud en la historia de la humanidad.
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