Madrid, 25 may (PL) Tras su debacle electoral del domingo en las elecciones autonómicas y municipales, el gobernante Partido Socialista Obrero Español (PSOE) iniciará una desesperada carrera para elegir a la figura que lo representará en las generales de 2012. El presidente del Gobierno español y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, cortó hoy de raíz el debate abierto sobre la metodología para designar a su sucesor, al confirmar la celebración de primarias internas.
Iremos a un proceso de primarias, que es lo que corresponde y lo saludable, subrayó el líder socialista en los pasillos del Congreso de los Diputados (Cámara baja) luego de una sesión de control a su administración.
Rodríguez Zapatero salió al paso a quienes dentro de la agrupación oficialista piden la celebración de un congreso extraordinario para renovar también la secretaría general, sobre todo después del varapalo en las urnas frente a la derecha, encarnada por el Partido Popular (PP).
En concreto respondió a la propuesta lanzada la víspera por el lehendakari (presidente del Gobierno Vasco) y máximo dirigente de los socialistas vascos, Patxi López, sobre la necesidad de convocar a ese magno encuentro para elegir cuanto antes al nuevo líder del PSOE.
Creo que se debe dar la mayor participación, no solo en la elección del candidato a los comicios de marzo de 2012, sino también en la definición de las propuestas y eso, en mi partido, se hace en un congreso, dijo López, tras calificar de voto de castigo los resultados del 22 de mayo.
La derrota del pasado domingo debilitó aún más a un partido que carga sobre sus espaldas el desgaste de la administración de Rodríguez Zapatero por la crisis económica, los altos niveles de desempleo (cercano a los cinco millones) y un severo plan de ajuste.
El actual inquilino del Palacio de la Moncloa (sede gubernamental) reveló que conversó este miércoles con el lehendakari y ambos convinieron en convocar las primarias internas.
Superada esta controversia, todas las miradas se centran ahora en el Comité Federal -máximo órgano de decisión del partido entre congresos- del venidero sábado, en el cual se pondrán los cimientos que deben sustentar la estructura del PSOE a corto, medio y largo plazos.
Un día antes, los dirigentes regionales socialistas buscarán consensuar una línea mayoritaria sobre el futuro inmediato de la formación para evitar el mínimo de fisuras.
Del proceso de primarias que se abrirá el sábado deberá salir el suplente de Rodríguez Zapatero, cuyos índices de popularidad se desplomaron por la gestión de la crisis económica, como cabeza de lista para las generales.
El vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, y la ministra de Defensa, Carme Chacón, son los máximos favoritos para reemplazar al jefe de Gobierno, tras su decisión de renunciar a un tercer mandato.
Iremos a un proceso de primarias, que es lo que corresponde y lo saludable, subrayó el líder socialista en los pasillos del Congreso de los Diputados (Cámara baja) luego de una sesión de control a su administración.
Rodríguez Zapatero salió al paso a quienes dentro de la agrupación oficialista piden la celebración de un congreso extraordinario para renovar también la secretaría general, sobre todo después del varapalo en las urnas frente a la derecha, encarnada por el Partido Popular (PP).
En concreto respondió a la propuesta lanzada la víspera por el lehendakari (presidente del Gobierno Vasco) y máximo dirigente de los socialistas vascos, Patxi López, sobre la necesidad de convocar a ese magno encuentro para elegir cuanto antes al nuevo líder del PSOE.
Creo que se debe dar la mayor participación, no solo en la elección del candidato a los comicios de marzo de 2012, sino también en la definición de las propuestas y eso, en mi partido, se hace en un congreso, dijo López, tras calificar de voto de castigo los resultados del 22 de mayo.
La derrota del pasado domingo debilitó aún más a un partido que carga sobre sus espaldas el desgaste de la administración de Rodríguez Zapatero por la crisis económica, los altos niveles de desempleo (cercano a los cinco millones) y un severo plan de ajuste.
El actual inquilino del Palacio de la Moncloa (sede gubernamental) reveló que conversó este miércoles con el lehendakari y ambos convinieron en convocar las primarias internas.
Superada esta controversia, todas las miradas se centran ahora en el Comité Federal -máximo órgano de decisión del partido entre congresos- del venidero sábado, en el cual se pondrán los cimientos que deben sustentar la estructura del PSOE a corto, medio y largo plazos.
Un día antes, los dirigentes regionales socialistas buscarán consensuar una línea mayoritaria sobre el futuro inmediato de la formación para evitar el mínimo de fisuras.
Del proceso de primarias que se abrirá el sábado deberá salir el suplente de Rodríguez Zapatero, cuyos índices de popularidad se desplomaron por la gestión de la crisis económica, como cabeza de lista para las generales.
El vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, y la ministra de Defensa, Carme Chacón, son los máximos favoritos para reemplazar al jefe de Gobierno, tras su decisión de renunciar a un tercer mandato.
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