La correspondencia que ha aparecido últimamente, dentro de un informe que fue colgado en una página web y luego retirado, demuestra el error de la Iglesia de Inglaterra a la hora de apoyar a las víctimas de un pederasta condenado, Roy Cotton, que fue ordenado sacerdote.
Ray Cotton. | BBC
Concretamente, en una carta, Lambeth Palace llegó a sugerir que Cotton debería ser destinado a "una parroquia cuidadosamente seleccionada". El mismo que años después ha insistido en que, en 1995, había fuertes políticas de salvaguardia en vigor para evitar estos casos.
La polémica ha surgido con el llamado 'Informe Meekings', que fue publicado online el miércoles y luego retirado, junto con otro documento publicado por la baronesa Butler-Sloss, encargada de esta investigación.
Una portavoz de la diócesis de Chichester aseguró a la BBC que el 'Informe Meekings' se retiró porque el documento había incluido accidentalmente alguna información confidencial, y en ambos estudios se examinaba el comportamiento de Cotton y de otro sacerdote también pederasta, Colin Pritchard.
En otra misiva de la época, dirigida al entonces arzobispo de Canterbury, Michael Ramsey, de fecha 13 de mayo de 1966, el obispo de Portsmouth le explicaba la historia de Cotton, incluyendo un delito cometido por éste en 1954, y sus reiteradas solicitudes para ser considerado para la ordenación.
La carta decía: "No estoy seguro de si al haber sido declarado culpable de un delito, habría necesidad o no de una dispensa especial suya. Yo estaría muy agradecido por su orientación en esta materia".
"Cotton es un hombre de considerable capacidad... y no creo que tras haber estado libre de cualquier problema durante 12 años, exista alguna probabilidad de inconvenientes en el futuro".
La respuesta del secretario del arzobispo, de fecha 17 de mayo de 1966, aclaraba que el máximo responsable eclesiástico estaba "tranquilo por lo que le habían comunicado y creía que era justo considerar ordenarlo con un título en la parroquia cuidadosamente seleccionada que se menciona".
Una investigación todavía abierta
Este miércoles todos estos datos salían a la luz y los encargados de los informes sobre los abusos de Cotton insistían en que "las solicitudes de las víctimas no habían sido tomadas en serio".
El obispo de Chichester se disculpó tras conocer lo ocurrido, mientras que la policía de Sussex emitió un comunicado asegurando que siempre había tomado estas acusaciones muy en serio.
Según un juez de la zona, ya jubilado, Roy Cotton podría haber abusado sexualmente de al menos 10 personas, durante su trabajo como sacerdote en Brede, cerca de Rye, en la década de los 90'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario