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jueves, 19 de agosto de 2010

La Guardia Urbana impone 24.000 denuncias por incivismo en Barcelona

La Guardia Urbana de Barcelona ha impuesto en el periodo comprendido entre el 1 de junio y el 8 de agosto 24.205 denuncias por el incumplimiento de la normativa de convivencia, 16.024 de ellas por venta ambulante, y 1.190 por realizar las necesidades fisiológicas en la calle.

El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, que hoy hecho balance del dispositivo de servicios municipales establecido para garantizar la convivencia en el espacio público durante el verano, ha asegurado que estas denuncias suponen una cifra inferior a la de 2009 por estas mismas fechas, un hecho que ha atribuido a la mayor presencia de Mossos d'Esquadra y de Guardia Urbana en la calle, con el consiguiente efecto disuasorio sobre 'lateros' e incívicos.

En el marco de este dispositivo, que centra su actividad sobre todo en las zonas de mayor presencia de turistas (Ciutat Vella, Eixample, playas y Montjuic), la Guardia Urbana ha decomisado 69.982 latas, ha denunciado a 145 prostitutas por ofrecer servicios y ha multado a 62 de sus clientes.

Hereu ha puesto el desarrollo de las fiestas de Gracia como ejemplo del buen funcionamiento del dispositivo. En estos días se han decomisado sólo en este barrio cerca de 16.000 latas, se han hecho 279 actuaciones contra la venta ambulante, operaciones que han supuesto que 192 personas fueran trasladas a los servicios de extranjería por carecer de papeles.

En el ámbito de los servicios de limpieza, el alcalde ha explicado que la nueva contrata está funcionando a pleno rendimiento, y que se ha producido un refuerzo del 16% de sus efectivos, aunque ha reconocido que la falta de lluvias durante el mes de julio en la ciudad no ha ayudado a que las calles tuvieran mejor aspecto.

La crisis ha provocado que muchos barceloneses se queden en la ciudad durante el verano, por lo que el uso de los espacios públicos está siendo más intensivo, especialmente las playas urbanas, donde se están alcanzado cifras de usuarios muy elevadas.

Así, desde el mes de mayo han pasado por los arenales de la ciudad 2.090.000 personas, casi un 40% más que en el mismo periodo del año pasado, y una cifra muy cercana a la de 2006, cuando se produjo un récord de turistas en la ciudad, y al final de la campaña (en septiembre) se contabilizaron 3,6 millones de usuarios.

Por ello, las playas están siendo uno de los puntos prioritarios de vigilancia, tanto en el control de venta ambulante (2.173 denuncias), de prestación de servicios no autorizados como masajes o lectura del tarot (443 denuncias) o para evitar que la gente acampe por la noche (309 denuncias).

Afortunadamente, el mayor uso de los arenales no se ha traducido en un incremento de los residuos (156.545 kilos, de ellos 28.452 sobre la arena). En los trabajos de recogida han participado unas brigadas con 47 personas.

Sobre la posibilidad de crear una tasa como la que Estados Unidos va a imponer a todos los turistas que entren en el país, Hereu ha asegurado que ésta tiene que ser una reflexión estratégica de todas las administraciones con el sector turístico. "Ha de ser una solución global y no unilateral", ha apuntado el alcalde.

La lucha contra la inseguridad

En materia de seguridad, ha afirmado que 2010 "está siendo mejor" que 2009, "que no fue un buen año". El número de hurtos está disminuyendo, a la vez que ha aumentado el número de detenciones, gracias también, ha dicho., al incremento del número de agentes patrullando, cerca de 500 más, entre guardias y mossos, que en junio del año pasado.

"En seguridad, lo importante son las tendencias y la tendencia es que está mejorando por la suma de diferentes medidas: mayor presencia policial, mayor coordinación entre cuerpos, mejor aplicación de la ley de extranjería y mayor coordinación con el sistema judicial", ha subrayado.

"Barcelona no tienen grandes problemas de seguridad, tiene el combate contra el hurto, y en esta lucha está obteniendo buenos resultados" ha afirmado Hereu.

El dispositivo especial incluye medidas para el control y reducción del ruido provocado por el ocio nocturno, para lo que se han inspeccionado 377 establecimientos, a la vez que se han instalado 105 limitadores acústicos para reducir las molestias durante la celebración de actividades al aire libre.

En este mismo apartado se han hecho más de un millar de inspecciones, entre otras para el control de aires acondicionados (221) o por el ruido provocado por locales de pública concurrencia (195), lo que ha conllevado la apertura de 267 expedientes.

Durante este mes agosto, el tráfico viario en la ciudad ha disminuido un 25%, una situación a la que contribuye el hecho de que TMB haya mantenido los intervalos de paso de los servicios de metro y autobús, que en los meses de junio y julio fuero utilizados por 32,1 y 65,1 millones de pasajeros.

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