.

.

domingo, 8 de agosto de 2010

Globos para limpiar la basura espacial

Todos conocemos los globos de helio por su capacidad de elevación, pero también podrían ser una forma eficaz de traer los satélites no operativos de vuelta a la Tierra, según un equipo de ingenieros.

Los satélites que ya no funcionan representan un peligro para las naves que orbitan la tierra. En 2009, uno de ellos se cruzó en el camino de un satélite operativo, lo que destruyó ambos aparatos dejando tras de sí miles de piezas de basura espacial.

Una forma de prevenir estas colisiones es hacer que los satélites enciendan sus motores al final de su vida útil para entrar en la atmósfera terrestre, en la que serían incinerados. Pero para conseguir esto se necesita darles combustible extra, lo que significa una masa adicional que aumenta el precio del lanzamiento.

Destrucción más rápida

Los globos serían una forma más barata de resolver el problema, según este equipo de ingenieros. Kristin Gates de la Corporación Global Aeroespacial en Altadena, California, presentó la idea el martes en la conferencia de Especialistas en Astrodinámica en Toronto, Canadá.

Cualquier nuevo satélite podría ser enviado al espacio con un globo acoplado a la cubierta. Una vez que el satélite alcanzase el final de su vida útil, se llenaría el globo con helio u otro gas, aumentando la fuerza de arrastre cuando el globo chocase con la atmósfera terrestre.

Un globo de 37 metros podría llevar un satélite a una altitud que permitiría su desintegración en menos de un año, mientras que sin el globo se tardarían décadas, según el equipo de ingenieros.

Algunas limitaciones

Según Brian Weeden, el concepto es realizable pero no funcionaría con todos los satélites. Por su parte, Kerry Nock, el presidente de la Secure World Foundation en Washington, admite que el concepto es posible realizarlo, pero con limitaciones. El globo sólo funcionaría por debajo de los 1.500 km, pero añade que eso quiere decir que se abarcaría una región muy congestionada, la que se encuentra entre los 800 y los 1.500, en la que se produjo el accidente de 2009.

No hay comentarios: