.

.

miércoles, 6 de enero de 2010

Repercusiones, de una muerte muy sentida

Miles de personas hacían fila ayer ante el Congreso argentino, donde eran velados los restos del cantante Sandro, un ídolo popular cuya fama se extendió a toda Latinoamérica. El cantante murió el lunes en Mendoza, a cuarenta y cinco días de haber recibido un trasplante de corazón y pulmones.

Dolor. La gente, admiradores anónimos que siempre estuvieron con él.

Dolor. La gente, admiradores anónimos que siempre estuvieron con él.

Desde muy temprano miles de fanáticos se concentraron en las escalinatas del Congreso, en una jornada tórrida, para darle su último adiós al cantante que cautivó a varias generaciones en cuarenta años de trayectoria artística, iniciada emulando a Elvis Presley aunque luego viró a la música romántica.

También frente a su domicilio de la localidad de Banfield, en la periferia sur de Buenos Aires, cientos de mujeres maduras, sus más fieles seguidoras, lloraban a su ídolo, le dejaban flores, mensajes y otros tributos al cantante que falleció a los 64 años de edad.

El féretro de Sandro, también conocido como el "Gitano", o el Elvis argentino, fue instalado en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso, un espacio sólo reservado a figuras relevantes de Argentina, como la cantante Mercedes Sosa, en noviembre pasado, o a ex presidentes como Raúl Alfonsín y Juan Domingo Perón.

El velatorio, que se inició cerca de la hora 13.00, según la agencia AFP, se prolongará por diez horas y reabrirá al público en la mañana de hoy miércoles antes de que sus restos sean trasladados a un cementerio de Lomas de Zamora.

A pedido de la familia, en esta oportunidad se prohibió el ingreso de cámaras de televisión y reporteros gráficos a la sala velatoria.

Los restos de Sandro habían sido trasladados la noche del lunes a Buenos Aires desde Mendoza, donde murió por un cuadro de infección generalizada tras dos operaciones en un mismo día y luego de ser sometido el 20 de noviembre a un trasplante de pulmones y corazón.

En su larga trayectoria, Sandro grabó cincuenta y dos discos y filmó dieciséis películas, entre ellas dos junto a la famosa cantante Carmen Sevilla, lo que le abrió las puertas de España.

Su popularidad trascendió fronteras y llegó a Venezuela, Colombia, Perú, Uruguay, Paraguay, Ecuador, México, Puerto Rico, Costa Rica y República Dominicana.

Su música también llegó al mercado latinoamericano de Estados Unidos, donde en 1969 recibió un disco de oro por haber sido el artista de ese origen con más discos vendidos y el primero de la región en llegar al famoso Madison Square Garden, reuniendo a unas 250.000 personas en dos noches en 1970.

De origen humilde, el artista revolucionó el mundo del rock con "Sandro y los de fuego" a comienzos de los 60, cuando se atrevió a cantar en español a clásicos anglosajones como The Beatles, Elvis Presley, Paul Anka y los Rolling Stones.

Pero luego se definió por la música romántica y, con temas como "Rosa, Rosa" o "Quiero llenarme de ti", sedujo desde el escenario a millares de mujeres, a las que él llamaba 'mis nenas' y que seguían alabándolo en la actualidad.

La muerte del popular cantante argentino Sandro fue destacada por la prensa española, que además subrayó su obra y lo comparó con el estadounidense Elvis Presley, definiéndolo como un "mito de la canción latinoamericana". "Considerado uno de los fundadores del rock en español, Sandro también incursionó en los géneros de la balada romántica y el pop latino. En su carrera vendió más de diez millones de copias", escribió el diario "El Mundo".

"Muere Sandro, un mito de la canción latinoamericana", tituló el rotativo "Público", y subrayó que su obra, de "más de cuatro décadas, desde el rock hasta la balada, le valió comparaciones con Elvis Presley".

Para "ABC", en tanto, Roberto Sánchez, el verdadero nombre de Sandro, era "el Elvis Presley argentino que hacía delirar a las 'nenas' (las seguidoras del cantante)". "Argentina llora la muerte de 'El gitano'", como llamaban a Sandro, todo un "ídolo popular en su país", escribió por su lado "El País de Madrid".

El diario "La Razón", por su lado, destacó que Sandro fue "el primer artista de Latinoamérica en llenar el Madison Square Garden de Nueva York", en 1970.

El popular cantante argentino Roberto Sánchez, más conocido como Sandro, fallecido la noche del lunes en Buenos Aires, fue uno de los precursores del rock en español y alcanzó el éxito en la década del 70 cuando llenó el Madison Square Garden como solista, tras haber integrado varias bandas de música. Marco Vidal, de la Agencia Ansa, recuerda que Sandro, quien se hizo popular en el ciclo televisivo "Sábados circulares" que conducía Nicolás (Pipo) Mancera, también incursionó en la actuación, protagonizando películas, como "Quiero llenarme de ti", "Muchacho", "Embrujo de amor" (junto a Carmen Sevilla), "Subí que te llevo" y "Gitano".

Entre los éxitos musicales se destacaron "Rosa, Rosa", "La vida continúa", "Al abrir la puerta", "Señor cochero", "Mi amigo el puma", "Tengo", "Así" , "Como te amo yo", "Una muchacha y una guitarra", recordados en toda América Latina. El artista argentino publicó 52 álbumes originales y vendió 8 millones de copias, aunque hay fuentes que elevan esa cifra hasta 22 millones.

Sandro, a pesar de estar identificado con la balada romántica, fue precursor del rock en español, un género musical en el que se destacó imitando al estadounidense Elvis Presley, tanto en su faceta musical como en sus movimientos pélvicos al cantar.

Cuando nació, el 19 de agosto de 1945, sus padres quisieron ponerle Sandro, pero no se lo permitieron los funcionarios del Registro Civil. Sin embargo, el músico adoptó ese nombre como seudónimo para su carrera artística.

Durante sus estudios primarios surgió su pasión por Elvis, a quien imitó al comienzo de su carrera y en su debut, durante un acto escolar realizado el 9 de julio de 1957.

Inició sus estudios secundarios, pero los abandonó para ayudar económicamente a sus padres. Trabajó en una carnicería, en una droguería, como tornero y sodero (repartidor de agua gasificada), mientras dedicaba su tiempo libre a la música.

Con el guitarrista Enrique Irigoytía formó Los Caribes y compartieron el grupo El Trío Azul (Sánchez, Irigoytía y Agustín Mónaco).

Sandro dijo en algunos reportajes, que gracias al rock había logrado abandonar su vida callejera.

En 1960 inició su carrera solista, con covers de clásicos del rock en español. El 13 de setiembre de 1963 grabó su primer disco, que incluía "¿A esto le llamas amor?", de Paul Anka, y en el lado B "Eres el demonio disfrazado" (Elvis).

En 1964, Sandro y Los de Fuego comenzaron a tocar en televisión y, aunque su debut fue en "Aquí la Juventud", logró popularidad en "Sábados Circulares" de Mancera.

El 11 de abril de 1970 se convirtió en primer latino en actuar y llenar el Madison Square Garden, en Nueva York, al realizar en vivo dos recitales ante 250.000 espectadores, presentaciones que fueron grabadas en un álbum en vivo lanzado ese mismo año.

En 1972 fue el primer artista en cantar en el estadio Luna Park, en Buenos Aires. En 1978 volvió a cantar en Argentina tras cinco años de ausencia, con un recital a beneficio en el Teatro Opera.

En 1991 hizo su último aporte al rock argentino al aparecer en el disco "Tango 4" junto a Charly García y Pedro Aznar en el tema "Rompan todo".

En 2001 batió un récord al presentar 42 funciones del espectáculo "El hombre de la rosa" en el Teatro Gran Rex. Tres años más tarde editó un CD por el "Día de la madre", que fue presentado en la Biblioteca Nacional, en un acto al que asistió la cantante Mercedes Sosa.

A principios de 2005 confirmó su retiro de los escenarios por su imposibilidad física para mantenerse en escena debido a problemas respiratorios.

Ese mismo año el intérprete recibió un premio Grammy Latino a la Trayectoria, galardón que otorga la Academia Latina de Música en Estados Unidos.

Desde entonces sus contactos con el público han sido a través de entrevistas telefónicas y en conferencias de prensa en los sanatorios privados donde estuvo internado.

No hay comentarios: