El grupo alimentario Danone ha anunciado el martes su cuenta de
resultados para 2012: 1.810 millones de euros de beneficios,
prácticamente plano con respecto al año anterior. La caída de las ventas
en Europa, del 3%, ha llevado al grupo francés a anunciar 900 despidos
en el área administrativa y gestión, tanto en la matriz como en sus
filiales en el continente, incluido España.
La intención de la empresa es reducir a la mitad su plantilla de
administrativos, entre otras medidas concentrando sus equipos para que
se ocupen a varios países a la vez. Danone presentará el mismo martes
los detalles de las medidas a los sindicatos franceses, aunque ha
afirmado que privilegiará "la movilidad interna y las salidas
voluntarias". Fuentes de la compañía han indicado que los sindicatos
españoles serán informados "en los próximos días". La Bolsa de París ha
acogido la noticia haciendo subir la acción de Danone, que a la una de
la tarde subía un 1% con respecto a la apertura.
"La caída de las ventas y la de los beneficios en Europa (de un 10%)
es una situación insostenible, pero la superaremos", ha afirmado el
director general de la empresa, Franck Riboud. No obstante, el propio
director financiero de Danone, André Térisse, ha reconocido que los
resultados han sido "mejores de lo esperado". El volumen de negocio de
la empresa creció un 2012 un 5,4% en términos relativos con respecto al
año anterior, marcando una cifra récord de 20.869 millones de euros. El
beneficio se ha sostenido gracias al fuerte empujón de las ventas en
Asia (que crecieron un 25,2%) y en el resto del mundo (un 14%).
Danone anunció el pasado día 14 una reordenación de sus actividades
en España, con el cierre a finales de 2013 de su fábrica en Sevilla,
donde trabajan 85 personas, y con el traslado de su producción a Aldaia
(Valencia) y Tres Cantos (Madrid).
No hay comentarios:
Publicar un comentario