El portavoz de la Asociación de Afectados del Grupo Marsans, Goyo
Martín, asegura que los ex trabajadores del grupo empresarial de Gerardo Díaz Ferrán han recibido con "júbilo y mucha alegría" la detención del ex presidente de la patronal CEOE.
"No creíamos ni que fuera a llegar hasta aquí porque actuaba con total impunidad confiando en su poder político y empresarial", afirmó Martín.
La plataforma de afectados denunció asimismo que Posibilitum, la empresa de Ángel de Cabo que se quedó con Marsans, se dedicaba oficialmente al tratamiento de animales exóticos y que pese a tener una capacidad de crédito de 28.000 euros se quedó con un grupo que costó, en teoría, 600 millones de euros.
"Este hombre ha vivido siempre del favor político y pensábamos que se iba a tapar",
prosiguió el portavoz de esta asociación que representa a 900 ex
empleados de Marsans, de los 4.000 con que contaba la compañía cuando
llegó la crisis que acabó con el cierre de la empresa.
La asociación considera que las propiedades y el dinero que se está
descubriendo en el marco de la 'Operación Crucero' debe destinarse al
concurso de acreedores de Marsans, para resarcir a los trabajadores y a
los clientes.
Sin embargo, se mostró convencido de que no se va a encontrar todo lo que pudieron sustraer Díaz Ferrán y de Cabo,
ya que está seguro de que gran parte seguirá oculta y otra parte
importante se ha "dilapidado" ya. Según recordó Martín, en la empresa se
encontró un agujero de 259 millones de euros.
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