La industria del porno es sacudida nuevamente por su gran temor, el virus del Sida. Muchas de las películas del género han quedado canceladas o en el aire después de que se supiera del contagio de uno de los actores. Como ya suele ser habitual en esta clase de anuncios, se desconoce la identidad del infectado.
Lo que sí ha confirmado la Coalición por la Libertad de Expresión, con sede en Los Ángeles, es que todas las grandes compañías de la industria, que mueve millones de dólares en todo el mundo, han aceptado detener su actividad para repensar las reglas sanitarias establecidas.
"La industria ha tenido un sistema de salud y seguridad en el trabajo muy exitoso desde 1998, pese a toda la desinformación filtrada por nuestros opositores", dijo Diane Duke, directora ejecutiva de la organización.
Sin embargo, en los últimos cinco años, al menos nueve personas más han dado positivo con el virus del Sida durante el rodaje de películas pornográficas, causando pérdidas cuantiosas a la industria, concentrada principalmente en el Valle de San Fernando, en Los Ángeles.
El último y más sonado fue el de Derrick Burts, conocido como el 'Paciente Zeta', que confesó al Los Angeles Times en una entrevista exclusiva haberse contagiado en un mes de clamidia, gonorrea y herpes, además de abogar por el uso del preservativo en una de las profesiones de más alto riesgo.
"La protección real es ponerte un condón mientras estás trabajando, pero sabemos que los espectadores no quieren ver eso. En mi vida he visto un condón durante un rodaje de una película heterosexual", aseguró.
Burts relató que trabajó en películas gays y heterosexuales, pero no está seguro de en qué momento se contagió.
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