Todos los policías del poblado mexicano de Ascensión, en el estado norteño de Chihuahua, han renunciado a sus cargos y entregado armas y uniformes, después del asesinato de dos de sus compañeros, han informado este jueves autoridades municipales.
"Efectivamente, todos renunciaron", ha confirmado un funcionario del ayuntamiento vía telefónica. Según el alcalde Jaime Domínguez Loya, citado por la agencia oficial mexicana Notimex, los 26 agentes de la corporación dejaron sus labores por temor luego de un ataque contra instalaciones policiales y la muerte de dos agentes en otro incidente.
El alcalde ha solicitado el apoyo al gobierno estatal de Chihuahua, autoridades federales y el Ejército para garantizar la seguridad. Los militares han estado haciendo los primeros patrullajes.
En septiembre del año pasado, el poblado de Ascensión ya se había quedado sin policías, después de que el alcalde anterior, Rafael Lorenzo, despidió a todos los agentes, que en ese momento eran 12, por pérdida de confianza y trabajo deficiente.
La decisión se tomó a petición de los habitantes, después de que cientos de personas mataran por linchamiento a dos presuntos secuestradores.
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