Peñarol continúa la gira con muy buen pie. Ayer nuevamente jugó un partido notable y terminó con el premio en el último minuto de un empate ante el Nápoles en el propio estadio San Paolo.
Por encima de que el local no tuvo a todas sus figuras ?de hecho el goleador Edison Cavani, Walter Gargano y Ezequiel Lavezzi no participaron porque estaban culminando sus vacaciones luego de su participación en la última Copa América?, es muy meritorio lo de Peñarol. El equipo de Diego Aguirre plantea los partidos de visitantes con la misma receta, realiza cambios en las integraciones pero la estructura táctica es la misma y se mantiene partido a partido.
Ayer el Nápoles comenzó con todo buscando marcar la diferencia desde el arranque, presionó y tuvo dos chances de gol muy bien conjuradas por el arquero Fabián Carini.
Con el paso de los minutos fue cesando la presión napolitana y también Peñarol contó con algunas llegadas aunque sin la claridad de su rival.
El primer capítulo terminó con igualdad a cero, resultado totalmente ajustado a lo observado en el campo de juego.
El complemento tuvo algunos cambios. De hecho llegó el gol de apertura de Nápoles cuando su mejor figura, Hamsik, definió notablemente dejando sin defensa a Fabián Carini. Lejos de desacomodarse, los aurinegros siguieron con su mismo planteamiento.
Diego Aguirre introdujo algunos cambios; uno de ellos es el juvenil Santiago Silva, que otra vez marcó la diferencia con un pase notable a Maximiliano Pérez para una mejor definición del ex delantero de Fénix. Peñarol terminó empatando sobre la hora, un resultado muy positivo de un equipo que dejó una imagen muy buena en Europa y que además lo potencia de cara al torneo Apertura.
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