.

.

miércoles, 3 de agosto de 2011

Colombia 2 - Mali 0






Con goles de José Adolfo ‘Trencito’ Valencia y James Rodríguez, la selección Colombia derrotó por 2-0 a Malí, la noche del martes y en el segundo juego del Grupo A disputado en un ‘Campín’ abarrotado hasta las banderas. La Tricolor hizo reserva en los Octavos de Final.

Desde el vamos del partido la tricolor tomó las riendas del juego y arrinconó a los africanos en su redil, generando fútbol por los costados y diagonales endiabladas con el protagonismo de Muriel y Ortega.

En una de esas, minuto 13, Muriel, un especialista en la media distancia, remató desde la cabecera, la pelota llevaba dinamita, le quemó las manos al arquero Cheick, la soltó, el reboteó le llegó a James Rodríguez, el del Oporto lo dudó, creyó que estaba en fuera de lugar y cuando remató lo hizo presionado tirándola por encima.

La dinámica ‘cafetera’ desnudaba las falencias defensivas y en zona de contención de Malí. Los africanos recurrían a reiteradas faltas para frenar los escurridizos movimientos del anfitrión. En ese marco el primer advertido con Amarilla fue Kader.

El visitante generó una escaramuza ofensiva en el minuto 18, cuando Sylla levantó una pelota desde el costado, balón elevado que buscó Fantamady, pero primero estuvo la intervención del arquero Bonilla.

Muriel volvió a ser protagonista en el minuto 21, cuando James Rodríguez lo puso a correr por el flanco derecho, el exDeportivo Cali le pegó de primera, entrando a las 16 con 50, intentó un remate cruzado y a ras de piso que, desafortunadamente, salió muy abierto.

Esa fue la antesala del gol colombiano. Minuto 22: pase magistral de Michael Ortega, con tres dedos y mucha precisión, el ‘Trencito’ Valencia partió con la venia del juez de línea, encaró al arquero, se la enganchó en el aire con la pierna derecha, el cerrojo pasó de largo, quedó con el arco en frente, remató, la esférica se estrelló en la humanidad de Coulibaly, le volvió a quedar al hijo del ‘Coloso’ quien, en segunda instancia, definió con frialdad. Adentro y golazo. 1-0.

Tras el gol, los de Lara perdieron algo de libretos, permitieron la reacción de Malí y en el 37 sufrieron un susto gigante cuando Cabezas no midió revoluciones, se barrió para desarmar a Touré entrando a las 16 con 50, el árbitro en principio señaló el punto penal, pero el juez de línea lo hizo caer en cuenta que la infracción había sido fuera del área y que el africano cayó adentro. Corrección arbitral y salvada para Colombia.

Ya en el segundo tiempo, minuto 1 y fracción, salida errática de Moreno, le quedó servida a Fantamady, vino el remate fuerte de pierna zurda, medido y arriba, iba bien ceñido al ángulo superior izquierdo y hasta allá llegó la estirada del arquero Bonilla. Atajadón.

Promediando el cuarto de hora de juego, el partido quería caer en lagunas. Para evitar el letargo, el técnico Eduardo Lara mandó a la cancha a un jugador de mucha dinámica como Fabián Castillo, sacrificando al hombre del gol, el 'Trencito' Valencia. Los africanos, al minuto 17, ya habían quemado sus tres variantes. Querían igualar a toda costa y sacar partida del momento irregular colombiano.

En el 28, James se comió la cancha, puso a correr a Castillo, el ex Deportivo Cali llegó hasta el límite de la cancha, enganchó, penetró las 16 con 50 cuando parecía que la redonda desbordaba, acomodó perfil de remate, disparó fuerte y a ras de piso, el arquero Cheick manoteó de emergencia y ningún 'cafetero' capitalizó el rebote.

En seguida, en el 29, James Rodríguez se animó en la media distancia, sacó un remate de zurda, potente y medido, llevaba veneno, Cheick no se complicó y le metió los puños para evitar líos. Colombia retomaba su dinámica.

En el 37 hubo susto en predios colombianos, cuando Khalil remató desde unos 30 metros, disparo con dinamita pura, puntazo a la redonda, llevaba destino de gol pero Bonilla estuvo en lo suyo, seguro, despejando arriba sin problemas.

Y en la agonía del juego, minuto 45 y fracción, vino la sentencia colombiana: pase milimétrico de Javier Calle (acaba de entrar), explotó en velocidad por izquierda James Rodríguez, quien se olvidó del regateo e hizo la europea, remató de primera, de zurda, potente, cruzado y a ras de piso, para ponerla en el fondo ante el impotente achique de Cheick. Golazo y sentencia. 2-0.

"TENEMOS HAMBRE DE GLORIA": James Rodríguez
“Gracias a Dios pude convertir el gol que nos da la clasificación, estoy muy contento por eso. Nosotros siempre tratamos de jugar bien, contra Corea tenemos que salir a jugar de la misma manera sin relajarnos y en busca de otros 3 puntos, el futuro de Colombia es bastante prometedor” .

"CUMPLIMOS EL PRIMER OBJETIVO": 'Trencito' Valencia
“Siempre para un delantero es importante anotar, por fortuna mi gol sirvió para que el equipo estuviera más tranquilo. Ahora no podemos aflojar, vamos por los otros objetivos”.

No hay comentarios: