Uruguay pudo golear, pero terminó sufriendo contra México

El pitazo del boliviano Orosco hizo que las 20.000 almas vestidas de celeste festejaran alzando sus brazos. Fue una mezcla de satisfacción y de alivio. Un raro final para un partido que tuvo a Uruguay como protagonista de principio a fin, que salió decidido a llevarse los tres puntos, que presionó, que atacó, que buscó por todos lados, pero que sólo encontró el gol en una jugada sucia en el área adversaria, tras un rebote del arquero y puntazo de Palito Pereira. Iba recién el primer cuarto del partido, y tal como se estaba dando, se podía esperar mucho más.

Los Sub 22 de México se vieron desbordados, superados por los delanteros y los laterales-volantes de los celestes que atacaron y llegaron hasta el área con cierta facilidad. Las situaciones de gol se sucedieron, pero la pelota no quiso entrar. Forlán estuvo a un tris de romper la racha, pero unas veces el arquero Michel y otras la mala definición, fueron postergando ese gol que ansiaba todo el mundo. Hasta los argentinos hacían fuerza para que Diego anotara, pero no se le dio.

México se defendió como pudo, pero cuando tomó la pelota Giovani Dos Santos armó flor de lío. La movió de un lado a otro e hizo difícil sacársela. El mismo tuvo el empate a los 23, pero Muslera se estiró y tapó el disparo cruzado, bajo, al segundo palo. Fue la única llegada de los aztecas en el primer tiempo.

Pero Uruguay no se quedó, no bajó las revoluciones, y eso fue lo más destacable de anoche. La actitud, las ganas, la entrega que tuvo todo el equipo con y sin pelota. Fueron leones en la cancha. La más clara la tuvo Forlán a los 30, tras un rebote, quedó de cara al gol, solo ante el arquero, miró, apuntó colocó el pie abierto, pero su disparo dio en el palo.

Suárez también tuvo sus chances, pero la pelota no entraba por ningún lado. Ni por arriba, ni por abajo.

Ese 1 a 0, y la agónica victoria de Chile ante Perú en Mendoza por 1 a 0, hicieron que desde ya se palpitara el clásico ante Argentina del próximo sábado. Pero el partido no estaba cerrado, es cierto, todo apuntaba a goleada, a que Uruguay asegurara los tres puntos, sin embargo, el pleito se fue yendo con ese 1 a 0.

El complemento fue más de lo mismo. Más goles errados de Forlán, del Cebolla, del Tata, de Palito, de Suárez y hasta una volea de Lodeiro que sacó magustralmente el arquero mexicano.

Sobre el final, en el último tramo del partido, México anunció. Llegó al gol pero en posición adelantada de Márquez. Y después tuvo otra clara, pero sin puntería.

Eguren y Abreu entraron para cerrar el partido. Para que los minutos corrieran y nada cambiara. Uruguay no especuló, eso quedó claro. Ganó, peleó por el triunfo, y ahora se las verá con el dueño de casa en Santa Fe.

Es lo que más le gusta a este Uruguay. Jugar ante el local, ir de punto, como lo fue ante Chile en Mendoza. En una de esas... se da lo que se dio en 1987. Ojalá.

Las estrellas

A. Pereira

Empujó mucho por la izquierda y metió el gol de la victoria.

S. Coates

Firmísimo. Cuando México fue al ataque, restó muchas pelotas

D. Lugano

Una columna. Ganó por arriba en las dos áreas.

L. Suárez

Protegió la pelota y se llevó a la rastra a sus marcadores.

Las cifras

2 goles tiene Álvaro Pereira en la Copa América. Es el goleador de la selección uruguaya.

1 baja por acumulación de amarillas tendrá la selección celeste: el zaguero Sebastián Coates.