Estados Unidos es uno de los países más preocupados por la ciberseguridad. De hecho, su plan de seguridad en Internet considera la posibilidad de ataques militares contra quienes alberguen a “ciberterroristas”.
Además, ahora se ha sabido que uno de cada cuatro hackers estadounidenses informa a las autoridades sobre las actuaciones de otros ‘piratas’ informáticos. Esta colaboración se habría conseguido amenazando a los hackers con largas penas de prisión a no ser que colaborasen con la agencia.
Según explicó Eric Corley a The Guardian, este método es efectivo porque los duros castigos con los que se amenaza y la “relativa falta de experiencia con la ley que tienen muchos hackers”, hacen que éstos sean susceptibles a la intimidación.
De este modo, muchos foros populares en este mundillo que son utilizados, por ejemplo, como mercado de identidades robadas y números de tarjetas de crédito, fueron administrados por ‘topos’ del FBI. En otros casos eran los propios agentes los que administraron los foros haciéndose pasar por hackers.
Todo esto hace que dentro del mundo hacker haya una cierta sensación de tensión. Uno de los casos más famosos de este tipo de ‘traición’ fue el de Adrian Lamo, que entregó a Bradley Manning, supuesto autor de las filtraciones a WikiLeaks, a las autoridades.
Lamo ha asegurado en diversas ocasiones que no se arrepiente de haber hecho esto. Además, recientemente explicó a Cnet que el Gobierno le ha ofrecido un trabajo. No obstante, la comunidad hacker no parece perdonarle esta actuación y recibió duras críticas en su aparición en la conferencia Hacker HOPE del año pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario