GIRONA | EFE Uno de los ladrones que se escondía en una maleta del bus entre el aeropuerto de Girona y Barcelona ha resultado ser un auténtico contorsionista. El hombre, que mide 1,78 metros viajaba en la bodega escondido en una maleta de 90 por 50 centímetros y de la que salía durante el viaje para "vaciar" de objetos de valor el resto del equipaje. Los Mossos dieron ayer los detalles de esta curiosa y nada habitual historia que ya avanzaba Martes Diari de Girona.
Los Mossos del aeropuerto Girona-Costa Brava habían recibido denuncias en las últimas semanas que se estaban produciendo hurtos del interior de las maletas que transportaban los autocares que salían del aeropuerto gerundense en dirección a Barcelona.
El pasado día 3 de junio, gracias a la colaboración ciudadana, los agentes del aeropuerto de Girona recibieron el aviso de que un ocupante del autobús que estaba a punto de salir en dirección a Barcelona había dejado una maleta sospechosa en la bodega del vehículo. Uno de los errores que cometieron los ladrones es comunicarse entre ellos, lo que levantó sospechas porque parecía que uno hablaba con una maleta. Inmediatamente los agentes se dirigieron a inspeccionar la maleta denunciada y al abrirla encontraron en su interior un hombre doblado como un contorsionista de circo.
En la mano llevaba un móvil y estaba equipado con una mochila pequeña, una linterna frontal y un objeto punzante que servía para abrir las cremalleras o candados. En descubrirlo el hombre estaba sudoroso y congestionado.
Ante este hallazgo, los agentes subieron al bus para localizar al hombre que había dejado la maleta en la bodega y detuvieron a los dos individuos, Krzysztof Grzegorz M, de 29 años, y Jouoastaw K, de 31, como presuntos autores de un delito de hurto denunciado el pasado 12 de mayo, por la sustracción de un ordenador portátil y un GPS.
Los investigadores descubrieron que los dos hombres habían puesto en práctica un innovador e imaginativo método de robo inédito hasta ahora: uno de ellos compraba un billete de bus para ir del aeropuerto de Girona hasta la estación del Nord de Barcelona. Después, los dos detenidos entraban en el baño y uno de ellos, de 1, 78 metros, se metía en el interior de una maleta de viaje de 90x50 centímetros.
Lo que había comprado el billete arrastraba la maleta hasta el autocar y la metía dentro del maletero junto con el equipaje de los otros viajeros. Una vez el autocar iniciaba el viaje, de unos 90 minutos de duración, el "contorsionista" salía de la maleta, y con la luz frontal encendida, para poder utilizar las dos manos, abría todas las maletas y buscaba objetos de valor, que escondía en una mochila más pequeña que llevaba encima.
Cuando habría cogido lo que quería, se volvía a meter dentro de la maleta hasta que su compañero la sacaba al llegar a su destino.
Los detenidos, de los cuales Krzysztof Grzegorz M. tiene antecedentes, pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Santa Coloma de Farners. Los Mossos del aeropuerto y los de la Unidad de Investigación de Santa Coloma de Farners están intentando recopilar información para poder localizar otras posibles víctimas de estos dos ladrones.
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