Los minoritarios altercados de la concentración del movimiento 15M ante el parlamento de cataluña, está sirviendo para que los medios de comunicación másivos inicien una campaña de criminalización del movimiento ciudadano.
Los medios no mostrarán los vídeos grabados por los manifestantes, en el que se revela una práctica habitual en las fuerzas de seguridad de todo el estado, infiltrar agentes dentro de las manifestaciones para provocar altercados.
Una práctica conocida por por los movimientos sociales, pues en el año 2001 Un total de 72 organizaciones se querellaron contra la Delegada del Gobierno en Cataluña y la Policía, por los incidentes ocurridos en la manifestación del movimiento antiglobalización del 24 de junio.
Fueron denunciados los agentes antidisturbios que cargaron contra los manifestantes y la veintena de policías de paisano infiltrados que, según los querellantes, provocaron los incidentes armados con palos y barras de hierro, y a los que atribuyen daños en cinco establecimientos comerciales del Paseo de Gracia.
La denuncia, que constó de más de 40 páginas, estuvo apoyada, entre otras entidades, por la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB), IC-Verds, ERC, el Sindicat de Periodistes de Catalunya, EUiA, PSUC-Viu, CCOO, UGT, SOS Racismo, la Campaña contra el Banco Mundial Barcelona-2001 y el Consejo de la Juventud de Barcelona.
Según el texto de la querella, diversos ciudadanos que presenciaron los hechos a declararon que vieron a individuos con estética "skin" y armados con palos y hierros "que participaron en las agresiones y luego fueron vistos practicando detenciones y entrando y saliendo de los furgones policiales".
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