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miércoles, 2 de febrero de 2011

Se casa Ruby, una de las supuestas prostitutas del harén de Berlusconi


La joven marroquí Karim El Mahroug, más conocida como Ruby y por protagonizar el 'cogollo' de la investigación sobre la relación del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi con la prostitución para sus fiestas, ha anunciado su boda para dentro de tres semanas.

En una entrevista, publicada en el diario 'La Repubblica', Ruby 'Robacuori' (robacorazones) declara que después de la boda, con un empresario que regenta varios clubes nocturnos llamado Luca Rizzo, de 41 años, seguirá inmersa en los pormenores de la investigación, terminará la escuela secundaria y fijará su residencia en Génova.

Una chica muy precoz

La chica, hija de inmigrantes marroquíes y que cumplió 18 años en noviembre, ha manifestado "no estar en absoluto" preocupada por la investigación que involucra a Berlusconi con la prostitución. Hace hincapié en que ella es sólo un testigo y que está deseando que "el juicio comience".

Preguntada por el destino de los asuntos judiciales de 'Il Cavaliere', ella se ha limitado a contestar: "No sé, ese es su problema". Sobre la supuesta existencia de un 'harén' en torno a Berlusconi responde con evasivas que el dirigente italiano únicamente se preocupa por las chicas, pero no admite que hubiera relaciones sexuales con ellas.

Su salto a la fama

Ruby se dio a conocer a los medios de comunicación cuando salió a la luz su supuesta relación con Berlusconi cuando ella era aún menor de edad, lo que constituye un delito en Italia.

Además, Berlusconi es sospechoso de abuso de poder por utilizar su posición como jefe de gobierno para poner en libertad a la chica después de haber sido detenida en mayo por robo.

En la entrevista, Ruby únicamente admitió haber asistido a fiestas celebradas en la ya célebre mansión de 'Il Cavaliere' junto con docenas de otras jóvenes que también han ido desfilando ante los focos de la prensa.

Sin embargo, arremetió contra los periodistas que la acusan de prostituta negando tal extremo. Según su versión, las cenas con Berlusconi eran de lo más normal (no es eso precisamente lo que sugieren las conversaciones telefónicas filtradas a la prensa) y nunca hubo relaciones sexuales a raíz de estos encuentros.

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