La economía catalana crecerá este año un 1%, unas décimas por encima de la española, lo que no será suficiente para bajar la tasa de paro, cosa que podría ocurrir en 2012, año en el que el PIB catalán crecería algo más del 2%, si las reformas necesarias se hacen con éxito, según ESADE.
El profesor de Josep Maria Comajuncosa ha presentado el Informe Económico de ESADE y ha pronosticado que la economía española tendrá un crecimiento muy "débil" este año, entre un 0,5 y un 1%, lo que, en la práctica, viene a significar que habrá un estancamiento económico.
Esta situación no supondrá ninguna mejora en la creación de empleo ni en la tasa de paro y hasta el año 2012 no se empezará a crear ocupación, cuando la economía española crezca en torno al 2%.
Según Comajuncosa, la economía catalana se mueve en unos parámetros similares a la española aunque en la medida en que es un poco más abierta "puede recuperarse con un poco más de rapidez" gracias al impulso exterior.
El Informe Económico destaca el alto grado de endeudamiento de la economía española con respecto al exterior, especialmente, del sector financiero privado, a lo que se ha sumado el endeudamiento público y la dificultad para volver al crecimiento, lo que está provocando problemas para colocar la deuda en los mercados.
Para superar estos problemas, Comajuncosa ha apostado por profundizar en las reformas ya iniciadas "que van en la buena dirección pero que no han sido suficientes para devolver la confianza a los inversores", entre ellas, la reforma laboral, la reforma del sector público, que incluye la reforma de las pensiones, y la del sector financiero.
Para Comajuncosa la reforma del sistema financiero se "ha quedado corta", principalmente en lo que se refiere a las cajas de ahorros, ya que siguen teniendo problemas para encontrar dinero en el mercado y financiar a empresas y familias.
Ha abogado por que las entidades reconozcan la pérdida de valor de los bienes inmuebles en sus balances para recuperar la confianza de los mercados, aunque pueda implicar la entrada en pérdidas o la necesidad de la ayuda del Gobierno.
Comajuncosa cree que el sistema financiero español debería haber aprovechado la recapitalización de las entidades financieras que se hizo en Europa para hacer lo propio en España, porque ahora las españolas necesitan ayuda y el resto de las entidades europeas ya han realizado el proceso.
Ha señalado que el sistema de cajas de ahorros que existía en España antes de la crisis desaparecerá y, de hecho, "ya no existe y se irá diluyendo más" y se mantendrán las cajas más importantes pero su naturaleza será diferente, "más similar a los bancos".
Según Comajuncosa, la reforma laboral se ha "quedado corta" y ha señalado que la reforma de las pensiones es necesaria aunque no tiene por qué implicar que la cuantía de lo que cobran los pensionistas se reduzca si la economía vuelve a crecer a buen ritmo.
Sobre una posible intervención de la economía española Comajuncosa ha señalado que es un "posibilidad que no se puede descartar" y ha señalado que una prima de riesgo por encima del 6% de forma sostenida "no es asumible y requeriría algún tipo de rescate".
Sin embargo, ha dicho que hay que "desdramatizar" esta situación porque supondría una ayuda para la economía española y que durante la primera mitad de 2011 seguirán las turbulencias en los mercados.
Ha recordado que si hay que rescatar la economía española, se ha de ampliar el Fondo de Estabilidad Financiera porque el PIB español es más del doble que el de Grecia, Portugal e Irlanda juntos.
En este contexto económico, Comajuncosa ha dicho que las medidas de recorte aprobadas por el nuevo gobierno catalán "tienen más un valor simbólico que real" porque los grandes gastos de las partidas públicas o dependen de Madrid "o no se pueden tocar" y ha apostado por conseguir un nuevo modelo de financiación cuando las mejore la coyuntura.
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