Tras un fin de semana especialmente complicado por la declaración de varios incendios intencionados en las provincias de Ávila, León y Zamora, la Junta de Castilla y León ha rebajado este lunes a nivel 0 —que indica que no hay peligro para personas o bienes— los incendios de Villaobispo de Otero (León) y la localidad abulense de Solana de Ávila. El fuego que se declaró en el término leonés de Castrocontrigo permanece en nivel 2 aunque, de acuerdo con las autoridades, evoluciona favorablemente. Alrededor de 300 vecinos que fueron desalojados de la localidad abulense de Palacios de Becedas como consecuencia del fuego que comenzó a propagarse en Solana este sábado han podido regresar a sus casas, después de una jornada que han pasado muchos en el polideportivo de El Barco de Ávila. Las llamas ya han calcinado más de mil hectáreas en una zona del Parque Regional de Gredos limítrofe con Cáceres. Los medios de extinción han logrado controlar este incendio forestal, así como el que se inició este sábado en Cubo de Benavente (Zamora) y que se extendió a la provincia de León, después de que el domingo por la noche se reprodujera en varios puntos. Este último siniestro ha quemado 825 hectáreas de superficie forestal, de las que 200 son arboladas, de pino de repoblación.
El incendio de Castrocontrigo se mantiene en nivel 2 desde este domingo, por la cercanía de las llamas a la localidad de Torneros de la Valdería, perteneciente a este término municipal y con algo más de 100 habitantes.
En las últimas horas, han trabajado en la extinción del incendio de Solana más de 300 personas, en un operativo compuesto por 14 medios aéreos, cinco técnicos, seis agentes medioambientales, dos brigadas helitransportadas, cinco brigadas de refuerzo del Ministerio, dos bulldozer, ocho autobombas, seis cuadrillas de tierra y distintos efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
En el fuego de Villaobispo se encontraban trabajando más de 75 efectivos, y ha intervenido asimismo un equipo de la UME.
La Consejería de Fomento y Medio Ambiente de Castilla y León ha informado de que los medios de extinción que siguen movilizados para sofocar el incendio en el municipio zamorano de Cubo de Benavente son dos agentes medioambientales, dos bulldozer, dos motobombas, tres cuadrillas de tierra y una unidad de intervención de la UME. Los medios aéreos ya han sido retirados. Este fuego, del que también se sospecha que ha sido provocado intencionalmente, arrancó en dos focos distintos que después convergieron para avanzar hacia el límite provincial con León, según ha detallado el alcalde del PP de Cubo de Benavente, Emiliano Bresne.
Mientras tanto, las brigadas terrestres de los Cabildos de La Gomera y Tenerife, conjuntamente con el personal de la UME, continúan realizando este lunes tareas de estabilización y perimetraje en la zona afectada por el incendio. Su labor se centra ahora en el fuego de suelo y subsuelo. El dispositivo aéreo que se mantiene en la isla está formado por un helicóptero del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES) del Gobierno de Canarias y dos hidroaviones de la Administración General del Estado, que siguen realizando descargas de agua con el fin de refrescar los diferentes puntos calientes que se encuentran en la zona afectada por el fuego.
La evolución positiva de las tareas de extinción del incendio de La Gomera ha hecho que se haya ordenado un nuevo repliegue parcial de los efectivos de la UME. A partir de este lunes se quedarán en la isla 40 militares, tres autobombas y un camión nodriza.
Otras zonas de la geografía española han sido víctimas de las llamas, en un fin de semana en que la situación era de alerta debido a las altas temperaturas. Los bomberos de Mallorca y los efectivos del Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat) han controlado en la mañana del lunes el incendio forestal declarado en la zona de Font de sa Cala, ubicada en la localidad mallorquina de Capdepera y que ha carbonizado 13,5 hectáreas de pinar. Continuán 40 efectivos en la zona vigilando que no se reactive el fuego. Este siniestro obligó a desalojar media docena de casas en la urbanización S'Heretat por el temor a que afectara a personas y bienes. Los vecinos pudieron regresar a sus hogares la noche del domingo.
Un nuevo incendio ha sido declarado en la zona de Son Vida, en Palma, concretamente, en el kilómetro 9 de la carretera Ma-1016, que une las localidades de Calvià y Puigpunyent, según ha informado en un comunicado el Servicio de Emergencias del 112.
Mientras tanto, once comarcas forestales de Cantabria permanecen en nivel 2 por alerta de incendios, debido a las altas temperaturas y la ausencia de lluvias, después de que la comunidad registrara seis fuegos a lo largo del domingo. Los tres que continuaban activos por la tarde —Liérganes, Villacarriedo y San Roque de Riomiera— han sido completamente sofocados en la madrugada del lunes.
Un incendio que ha comenzado esta madrugada ha quemado 7.000 metros cuadrados de caña en Sabadell (Barcelona), junto a la carretera B-140, y se ha dado por controlado hacia las cinco de la mañana. Según fuentes de la Generalitat, se ha procedido al desalojo de dos masías como medida preventiva, cuyos ocupantes han podido regresar una vez se han estabilizado las llamas, apenas una hora después de que comenzaran a propagarse. Se ha recomendado a los vecinos que permanezcan en sus casas para evitar la inhalación de humo. Su intensidad ha obligado a ventilar un edificio. En la extinción del fuego han participado siete dotaciones de bomberos de la Generalitat de Cataluña.
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