.

.

viernes, 10 de agosto de 2012

Barco Miami-La Habana de ayuda humanitaria, a tope de contrabando consumista


El servicio de la International Port Corporation, estaba destinado en principio a que los cubanos que podían recibir ayuda del exterior, la tuvieran, para mejorar aspectos de su vida que resultaran humanitariamente comprensibles.

La tolerancia se mantuvo incluso después de ver que los envíos tenían aspectos de “ayuda” sumamente curiosos. Así pasaron televisores de pantalla plana, cereales de marca estadounidense, lavadoras, computadoras, incluso ropa de cama.

Pero cuando el barco llegó cargado de cortadoras de césped, secadoras de ropa e incluso piscinas portátiles, la autoridad portuaria intervino.

EEUU “permite cualquier cosa”

“El gobierno de Estados Unidos permite enviar a la isla casi cualquier cosa bajo la cobertura de ayuda familiar, siempre que el destinatario sea un individuo, o los productos sean llevados por cubanos de visita que regresan a su país, la definición norteamericana es muy amplia siempre”, explicó el director de la empresa que atiende la línea marítima, Leonardo Sánchez.

“Ahora el gobierno cubano se puso más exigente, alegando distintas razones: así, aceptarán ventiladores pero no equipos de aire acondicionado; lavadoras puede ser, pero no secadoras que consumen mucha electricidad. También podrán enviarse bicicletas, pero no motocicletas como se han querido enviar”, agregó.

Las explicaciones se hicieron imprescindibles cuando se apresta a partir un nuevo viaje a La Habana, donde un cubano no residente ha decidido volver a la isla para abrir un taller de máquinas ya autorizado.

No hay comentarios: