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martes, 21 de junio de 2011

La Generalitat mejora la oferta a Ryanair para que se quede en el Aeropuerto de Girona


La Generalitat sube la apuesta del anterior gobierno tripartito para que Ryanair permanezca en el Aeropuerto de Girona. Eso sí, lo hace en especies. Aunque la subvención de base no crece, sí añaden una revisión automática si aumenta el número de viajeros y una serie de contraprestaciones.

La propuesta que ha presentado la Generalitat a la compañía aérea de bajo coste "mejora", según el propio Govern, el preacuerdo que la aerolínea firmó con el tripartito. Así, el gobierno de Mas mantiene los 7,5 millones de euros de subvención por dos millones de pasajeros (cuatro millones en total, contando la ida y vuelta). Además, la compañía se ahorrará cuatro millones de euros en tasas.

La mejora de esta oferta pasa por, según el director general de Transporte de la Generalitat, Ricard Font, una propuesta progresiva en la que se establece que se pagará un porcentaje por cada pasajero que pase de los dos millones iniciales, con lo que el convenio se revisará de forma automática. Además, la Generalitat se compromete a mantener la rebaja de tasas tanto si éstas dependen de Cataluña como si queda en manos privadas o de Aena, con quien se compromete a negociar este descuento.

A esta subvención de crecimiento autonático le añade tres contraprestaciones. En concreto, propone la cesión de unos terrenos de CIMALSA frente al Aeropuerto para la construcción y gestión de un hotel por parte de Ryanair; la creación conjunta con la Generalitat de un centro de formación de tripulantes de cabina -un aspecto que ya se trató en la negociación con el tripartito-; o la construcción entre Aena, la Generalitat y la compañía de un hangar gestionado por la aerolínea.

El Govern considera imprescindible la recuperación de rutas domésticas como las de Madrid o Sevilla y el aumento de frecuencias con países de procedencia de la mayoría del turismo que visita la Costa Brava, como es el caso de Francia o Alemania.

Otra de las novedades de esta propuesta, que en caso de ser aceptada por la aerolínea de bajo coste sería válida entre el 2012 y el 2016, es que el Ayuntamiento de Girona pasa a formar parte de la AGI, la entidad que gestiona el aeropuerto. Esto significa que esta administración también hará una aportación económica para el futuro convenio. Aunque desde la Generalitat por el momento no han querido desvelar la cantidad aportada por cada institución, sí han avanzado que la diputación doblará su subvención.

La tardanza de la propuesta, culpa de las cuentas del Govern

El director general de Transportes, que ha explicado que están en conversaciones desde febrero con Ryanair, ha justificado la tardanza de la propuesta en la espera de una auditoría y la necesidad de conocer los presupuestos del Govern para saber su disponibilidad económica. Además, ha destacado la importancia de que el Estado concrete las líneas maestras del nuevo modelo aeroportuario y evaluar la predisposición y disponibilidad del resto de instituciones integrantes de la AGI, algunas de las cuales han cambiado con las recientes elecciones.

Para conseguir una mayor estabilidad, desde la Generalitat también apuestan por que el Aeropuerto de Barcelona sea de vuelos intercontinentales, y los de Girona y Reus asuman principalmente el 'low cost'. Las aerolíneas de bajo coste podrían seguir operando desde Barcelona, pero sería de forma residual.

Tanto desde el Govern como desde la Cámara de Comercio se han mostrado esperanzados por que la compañía irlandesa valore positivamente la propuesta, porque creen que "avanza en un modelo de relación más directo con Ryanair y presenta unas propuestas para el arraigo de la compañía y para seguir creciendo".

En cuanto a que Ryanair habría incumplido el contrato vigente, ya que se comprometía a trasladar cinco millones de pasajeros a cambio de 3,8 millones de euros y acabó eliminando rutas y disminuyendo frecuentas, Font ha indicado que "esto forma parte de la post-negociación, que no será nada agradable".

El aeropuerto de Girona, que tuvo en el 2010 un total de 4,8 millones de pasajeros, cerró el año con unos beneficios de 13 millones de euros. En mayo, el número de pasajeros descendió un 41% respecto al año anterior.

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