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viernes, 4 de septiembre de 2009

Libreta vale 10 veces más en Rocha que en Flores

Tener libreta es caro, muy caro incluso en algunos puntos del país. Y tampoco son los mismos los criterios para la formación de conductores. En la capital se trató de profesionalizar a los instructores, pero en el Interior persisten el informalismo.
El precio de libretas y multas va a contrapelo de la pretendida unificación de las reglas viales que tiene como cometido la Unasev. El edil nacionalista de Canelones Joselo Hernández, revisó lo que cobra cada intendencia por la libreta de manejar y denunció públicamente que "en las comunas dirigidas por el Frente Amplio" se dan los importes más altos. Rocha, Florida, Maldonado y Canelones, cuatro departamentos hoy conducidos por la izquierda, encabezan la lista de precios.
Pero sacar la libreta no es el único gasto. Richard Arce lleva 30 años como instructor de choferes. Su padre fundó hace cuatro décadas la Academia Leo. En ese tiempo el tránsito en la ciudad de Montevideo cambió radicalmente. Incluso ahora se ha vuelto más complicado enseñar a los aspirantes a categoría amateur a conducir en un tráfico tumultuoso, donde además los "coches escuela" cada vez son menos respetados.
"El parque ha crecido una enormidad, y mucho más las motos que ahora se convirtieron en la principal causa de accidentes. Hasta hace unos años la mayor cantidad de accidentes eran protagonizados por taxis, pero eso se revirtió. El problema que tenemos ahora son las motos", comenta Arce.
En Montevideo existen poco más de 80 escuelas de conducción. Se estima que mensualmente el municipio expide alrededor de 1.800 licencias de conducir y, como requisito previo, los aspirantes deben haber cursado un mínimo de 15 horas de instrucción.
En la capital se ha puesto más énfasis en la profesionalización de la instrucción de conductores, al punto que a principios de este año unos 200 instructores recibieron un curso de actualización a cargo de docentes del Centro de Prevención de Accidentes (CEPA International), en convenio con la Intendencia Municipal de Montevideo, que lo exigió a las escuelas para uniformizar los criterios del aprendizaje de la conducción vehicular.
La escuela que dirige Arce participó de estos cursos y también asesoró a la comuna en algunos aspectos de los requisitos, como por ejemplo la duración de los cursos. "Una persona para aprender a manejar bien necesita un mínimo de 25 horas de aprendizaje, cuando la Intendencia nos consultó planteamos esto, aunque finalmente se resolvió que fuera un mínimo de 15 horas. Nosotros entendimos que era razonable porque incluso desde el punto de vista económico (25 horas) podía resultar más complicado para la gente", indicó Arce.
El curso básico para obtener la licencia de conducir amateur (15 horas de prácticas y 4 horas de teórico) cuesta $ 5.300, que incluye la utilización del vehículo de la escuela para dar examen, a lo que debe sumarse los $ 450 del examen médico -que puede realizarse en cualquier institución médica- y los $ 698 que cuesta la licencia expedida en Montevideo.
El mejor "termómetro" para medir el grado de dificultades con que se maneja en el tránsito montevideano son los cursos para la obtención de las licencias profesionales (para taxis, remises, ómnibus y camiones). Dado que la normativa municipal exige un mínimo de tres años de antigüedad en el manejo, y además ser mayor de 23 años en el caso de la licencia para ómnibus, la experiencia también puede "jugar en contra". "Cuando nos llegan los aspirantes a profesionales lo que más trabajo nos da es que hagan a un lado todos los vicios que traen de manejar en el tránsito, notamos que no se conoce la ordenanza de tránsito y que no se respetan las señales, algo en lo que nosotros insistimos mucho", explica Arce.
CONTRASTES. "Lo que hicimos en febrero de este año fue instruir a los instructores en formación técnico pedagógica, vimos procesos ideales para la formación de un aspirante, cómo transmitirles el conocimiento", explicó por su parte Darío Bonilla, de CEPA y uno de los responsables del programa de actualización para todas las escuelas de conducción.
El curso duró cinco semanas y, a juicio de Bonilla, fue muy satisfactorio. "No había un procedimiento unificado para la instrucción, nosotros les dimos una visión más científica y se buscó que cada uno se autoevaluara y buscara su perfeccionamiento", señaló Bonilla.
Sin embargo, existe la percepción de que los desniveles de formación son más marcados entre la capital y el Interior, sobre todo en aquellos departamentos donde la menor densidad demográfica se refleja en un tránsito más pequeño.
"Nosotros no trabajamos en el Interior, nuestra línea principal de trabajo es la de asesoramiento a empresas. Pero en base a contactos y observaciones que hemos hecho, vemos que la situación en el Interior es bastante similar a la que se daba hasta hace poco en Montevideo", indicó Bonilla.
En muchas ciudades del Interior suele ocurrir que "tenés un auto, sos instructor", describió. A juicio del experto existen niveles de informalidad más marcados que en la capital, con las excepciones de Maldonado y Canelones donde el perfil es similar al de Montevideo. La Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev) impulsa, sobre la base de la nueva ley de tránsito, la unificación de criterios para expedir licencias de conducir.
En Florida se aplica sistema de escala para las multas
FLORIDA ALEXIS TRUCIDO
El costo de la licencia de conducir en Florida es de $ 907, la segunda más cara del país, y renovar el documento vale lo mismo.
Para las infracciones el municipio floridense aplica un sistema de escalas, según la gravedad de la falta.
No respetar la señal del cartel de "Pare" en Florida conlleva a una multa grado 4, en una escala de 7, por la que se deberá pagar dos Unidades Reajustables: $ 840. Mientras tanto, la multa por exceso de velocidad, se encuentra entre los grados 3, 4 y 5 de la escala y el máximo del pago por la infracción puede llegar hasta las tres UR: $ 1.260.
No obstante, según la normativa municipal, los montos de las multas correspondientes a infracciones a reglas de circulación, condiciones de seguridad que debe reunir los vehículos u obligaciones que debe cumplir el conductor serán aumentadas en un cien por ciento, cuando se trate de vehículos que transporten cargas inflamables u otras cargas peligrosas.
También cuando exista, dentro de los doce meses anteriores, reincidencia en una misma infracción o en infracciones graves, la autoridad podrá duplicar las sanciones previstas.
Los conductores que participen en accidentes de tránsito de los que resulten personas muertas o con lesiones graves o gravísimas podrán ser inhabilitados preventivamente por un plazo de setenta y dos horas.
Los conductores que hayan sido procesados por lesiones u homicidio culposo, deberán aprobar, previamente a su rehabilitación, un examen médico y psicofísico ante la autoridad que expidió la licencia.
Quedarán inhabilitados, por el término de un año, quienes conduzcan en estado de ebriedad o bajo los efectos de drogas o psicofármacos que puedan inhibir o incapacitar para conducir con seguridad, en forma transitoria.
¿Qué vale más: correr o parar mal el camión?
Las disparidades en materia de precios son marcadas entre los municipios, tanto en lo relativo al costo de las licencias de conducir, como en el ránking de multas por infracciones.
Maldonado, como primer ejemplo, aplicó una rebaja a la licencia de conducir. A $ 1.164 era el más caro del país. Ahora cuesta $ 874; para motos costaba $ 816 y ahora $ 612. En cuanto a multas, la mayor se aplica al exceso de velocidad, que se castiga con $ 4.280, en tanto que se paga $ 2.149 por no respetar un cartel de "Pare".
En Tacuarembó la multa por exceso de velocidad es también la más abultada: $ 6.300, en tanto que no respetar un "Pare" se sanciona con $ 2.520.
En Rivera la sanción más alta se aplica a las espirometrías positivas -cabe recordar que desde marzo pasado el máximo tolerado es de 0,3 gramos de alcohol por litro de sangre- con 10 Unidades Reajustables, $ 4.200.
La escala de Cerro Largo presenta algunas peculiaridades, relativas a criterios aplicados. El exceso de velocidad se sanciona con $ 1.260, o manejar sin licencia que se pena con $ 6.300. Sin embargo, la multa más costosa es por estacionar vehículos pesados dentro de la planta urbana, donde está específicamente prohibido, y se sanciona con $ 12.600.
En Paysandú, la escala de multas aplicadas es similar a la mayoría de los departamentos, pero la infracción que lleva la multa más cara tiene un valor de $ 4.200 y corresponde a espirometrías positivas.
El País Digital

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