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viernes, 24 de agosto de 2012

Despidos masivos entre los españoles que acuden a trabajar a Gibraltar

Gibraltar no sólo está acosando a los pescadores españoles que intentan faenar en las aguas cercanas al Peñón, también está despidiendo a los trabajadores que a diario, más de 5.000, acuden a la colonia a ganarse el sustento. La relación que puedan tener los dos temas queda a la libre interpretación de cada uno.

La realidad es que, como denuncia el Circulo de Trabajadores y Pensionistas Españoles en Gibraltar (Citype) desde que comenzó el año han sido más de 500 los españoles, la mayoría de ellos linenses, que han perdido su puesto de trabajo.

En los últimos días, según fuentes consultadas por ELMUNDO.es, también han caído 40 más y entre el colectivo la intranquilidad es notoria ya que se comenta que puede producirse, en las próximas semanas, el despido en masa de otro buen número de empleados.

Francisco Ponce es el presidente de Citypeg y explica que "muchos de los que se han quedado en el paro son del sector de la construcción". Aunque no se deba a la falta de trabajo ya que "los ingleses han sido colocados en otras empresas y además era gente fija".

La sensación de que la medida tiene que ver con la crisis diplomática es cada vez mayor entre los españoles que cada día cruzan la verja. El Ejecutivo de Fabian Picardo no se posiciona respecto al particular aunque desde Citypeg recuerdan que "ya había algunos mensajes que llegaban desde la parcela política que creaban incertidumbre".

A todo esto hay que sumar la eterna polémica por las pensiones que perciben los españoles que han cotizado en la roca, y los problemas que tienen para recibirlas debido al particular sistema de la colonia que reduce, notablemente las prestaciones para los empleados no gibraltareños.

Pero esa es otra historia, ahora lo que preocupa es "que sigamos en esta escalada de despidos", apuntan los empleados sin poder evitar que mucho de lo que está ocurriendo tiene que ver con el conflicto pesquero, del que por cierto, Picardo también culpa a la permisividad que en su día tuvo Peter Caruana, anterior ministro principal, con los marineros de la Bahía de Algeciras.

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