Girona se situó como la tercera demarcación del conjunto del Estado con menos participación el pasado domingo. Según los datos con el escrutinio al 100%, sólo las Islas Baleares, con 37,80%, y Las Palmas, con 37,41% superaron el registro del 36,38% que se obtuvo en las comarcas gerundenses.
Cataluña registró la segunda participación más baja de la historia en unas elecciones generales, después de que acudieran a las urnas el 66,84% de los ciudadanos con derecho a voto, del mismo modo que el voto nulo y el blanco llegó a registros máximos -el voto nulo se triplicó hasta el 1,58% del censo y el blanco llega al 1,85%-.
Los datos, obtenidas de los votos escrutados, sitúan la abstención de Cataluña al 33,18% -cinco puntos por encima del conjunto de España-, una cifra sólo superada a las elecciones del año 2000, cuando también el PP obtuvo la mayoría absoluta.
La incidencia de la lluvia, pero, no tuvo consecuencias al conjunto del Estado. En la mayoría de localidades donde más llovió este fin de semana, entre sábado y domingo, los índices de abstención son similares o incluso inferiores a la media nacional, que se situó en el 28,31 por ciento, según datos del ministerio del Interior.
De las localidades en las cuales más llovió este domingo, la única que supera el índice de abstención en cuanto a todo el Estado es Girona, donde se abstuvo el 36,38 por ciento de los votantes y que acumuló 31 litros por metro cuadrado de precipitaciones.
En todo caso, si la media de la abstención entre el comicios de 2011 respecto a los de 2008 (26,15 por ciento) es un 2,16 por ciento superior, mientras que en la mayoría de las provincias en las cuales más ha llovido, el incremento en el índice de abstención ha sido ligeramente superior entre un uno y un dos por ciento superior a la media.
Así, según precisó el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (*AEMET), sábado llovió a *Garrucha (Almería) 100 litros por metro cuadrado y en esta localidad, según el ministerio del Interior, se registró el 20 de noviembre una abstención del 26,68 por ciento.
Del mismo modo, en Vinaròs (Castelló) se recogieron 165 litros por metro cuadrado mientras que registró una abstención del 25,80 por ciento; a *Piornal (Cáceres) se acumularon 132 litros por metro cuadrado y registró una abstención del 14,89 por ciento, casi la mitad de abstención que la media nacional. Por su parte, a Villarejo de Valle (Ávila) cayeron 108 litros por metro cuadrado, pero el índice de abstención fue del 10,84 por ciento.
El mismo día del comicios las precipitaciones se focalizaron especialmente al País Valenciano. De este modo, según añadió el portavoz de la *AEMET a Europa Press, este domingo llovió 125 litros por metro cuadrado en Sot de Ferrer (Castelló), una localidad que tuvo un 11,06 por ciento de abstención, es decir 17,25 puntos menos de abstención que la media nacional.
Por otra parte, especialmente notable es el aumento del voto nulo en Cataluña, que triplica el del 2008 y llega al 1,58% del censo -más de 55.000 personas-, marcando un máximo histórico sólo superado el 1979, cuando el conocimiento del sistema electoral por parte de los votantes era inferior y el voto nulo respondía más a errores de los electores que a una opción militante. Ya a las elecciones municipales de este año, el voto nulo llegó al 1,68% del censo y el voto blanco hasta el 4,19%, cosa que refuerza la idea de un cambio de tendencia que, si bien representa una parte mínima del electorado.
El voto nulo a las elecciones del Senado estuvo todavía más elevado que en el caso del Congreso, ya sea porque el proceso de voto es más complicado o bien porque los votantes reflejen en la cámara alta parte de su descontento.
De hecho, desde las elecciones del 1982 no se obtenían cifras tan altas de voto blanco y nulo al Senado, con cerca del 95% escrutado en las cuatro circunscripciones catalanas, y que reflejaban que entre el 4,1% y el 5,4% de los votos estuvieron nulos y entre el 7,3% y el 7,8% estuvieron en blanco.
Cataluña registró la segunda participación más baja de la historia en unas elecciones generales, después de que acudieran a las urnas el 66,84% de los ciudadanos con derecho a voto, del mismo modo que el voto nulo y el blanco llegó a registros máximos -el voto nulo se triplicó hasta el 1,58% del censo y el blanco llega al 1,85%-.
Los datos, obtenidas de los votos escrutados, sitúan la abstención de Cataluña al 33,18% -cinco puntos por encima del conjunto de España-, una cifra sólo superada a las elecciones del año 2000, cuando también el PP obtuvo la mayoría absoluta.
La incidencia de la lluvia, pero, no tuvo consecuencias al conjunto del Estado. En la mayoría de localidades donde más llovió este fin de semana, entre sábado y domingo, los índices de abstención son similares o incluso inferiores a la media nacional, que se situó en el 28,31 por ciento, según datos del ministerio del Interior.
De las localidades en las cuales más llovió este domingo, la única que supera el índice de abstención en cuanto a todo el Estado es Girona, donde se abstuvo el 36,38 por ciento de los votantes y que acumuló 31 litros por metro cuadrado de precipitaciones.
En todo caso, si la media de la abstención entre el comicios de 2011 respecto a los de 2008 (26,15 por ciento) es un 2,16 por ciento superior, mientras que en la mayoría de las provincias en las cuales más ha llovido, el incremento en el índice de abstención ha sido ligeramente superior entre un uno y un dos por ciento superior a la media.
Así, según precisó el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (*AEMET), sábado llovió a *Garrucha (Almería) 100 litros por metro cuadrado y en esta localidad, según el ministerio del Interior, se registró el 20 de noviembre una abstención del 26,68 por ciento.
Del mismo modo, en Vinaròs (Castelló) se recogieron 165 litros por metro cuadrado mientras que registró una abstención del 25,80 por ciento; a *Piornal (Cáceres) se acumularon 132 litros por metro cuadrado y registró una abstención del 14,89 por ciento, casi la mitad de abstención que la media nacional. Por su parte, a Villarejo de Valle (Ávila) cayeron 108 litros por metro cuadrado, pero el índice de abstención fue del 10,84 por ciento.
El mismo día del comicios las precipitaciones se focalizaron especialmente al País Valenciano. De este modo, según añadió el portavoz de la *AEMET a Europa Press, este domingo llovió 125 litros por metro cuadrado en Sot de Ferrer (Castelló), una localidad que tuvo un 11,06 por ciento de abstención, es decir 17,25 puntos menos de abstención que la media nacional.
Por otra parte, especialmente notable es el aumento del voto nulo en Cataluña, que triplica el del 2008 y llega al 1,58% del censo -más de 55.000 personas-, marcando un máximo histórico sólo superado el 1979, cuando el conocimiento del sistema electoral por parte de los votantes era inferior y el voto nulo respondía más a errores de los electores que a una opción militante. Ya a las elecciones municipales de este año, el voto nulo llegó al 1,68% del censo y el voto blanco hasta el 4,19%, cosa que refuerza la idea de un cambio de tendencia que, si bien representa una parte mínima del electorado.
El voto nulo a las elecciones del Senado estuvo todavía más elevado que en el caso del Congreso, ya sea porque el proceso de voto es más complicado o bien porque los votantes reflejen en la cámara alta parte de su descontento.
De hecho, desde las elecciones del 1982 no se obtenían cifras tan altas de voto blanco y nulo al Senado, con cerca del 95% escrutado en las cuatro circunscripciones catalanas, y que reflejaban que entre el 4,1% y el 5,4% de los votos estuvieron nulos y entre el 7,3% y el 7,8% estuvieron en blanco.
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