La hoja de ruta del golpismo latinoamericano contra el gobierno del presidente de Ecuador, Rafael Correa, resulta copia y calco de la ensayada en Venezuela, Bolivia y Argentina: si no es cuartelera (como en Honduras) o
supermoderna(como en Chile), la democracia será calificada de
caudillista,
autocrática,
populista,
corrupta,
tropicalista,
narcotraficante,
terrorista, etcétera.
Los medios hegemónicos diseñan la matriz de opinión. Para la liviana Wikipedia (uno de los más neutrales
) existirían hasta hoy dos versiones
(sic) del golpe fallido contra Hugo Chávez (2002). En el portal, la arremetida de la ultraderecha boliviana contra el gobierno de Evo Morales no existió, en tanto la ofensiva del agropower para destituir a Cristina Fernández de Kirchner habría sido a causa de la crisis económica
(2008).
Borracha de objetividad
, Wikipedia define el golpe fallido contra Correa (30 de septiembre de 2010) como “…paralización de actividades por una parte de la policía y la fuerza aérea” (sic). ¿Que si el gobernante fue baleado, gaseado y estuvo a punto de ser linchado por los alzados? ¡Asunto de opinión
!
A inicios de febrero, el columnista Ernesto Palacio afirmó que Correa “…ordenó disparar contra un hospital lleno de civiles durante el intento golpista” (El Universo, Guayaquil, 6/2/11). ¿Que si el presidente constitucional de Ecuador es el comandante en jefe de las fuerzas armadas, y estaba justamente allí, secuestrado y herido por los golpistas? ¡Asunto de opinión
!
Correa interpuso una demanda contra El Universo por injurias calumniosas
(tipificado en el artículo 489 del Código Penal), y la justicia falló en su favor: tres años de prisión contra el trío de magnates dueños del legendario periódico oligárquico (hermanos Carlos, César y Nicolás Pérez), y una multa de 42 millones de dólares a todos los difamadores.
Las trincheras mediáticas y políticas de la derecha criolla se pusieron nerviosas: ¿qué tal un acuerdo de amiguitos
, con cerveza y un buen ceviche costeño? Correa fue contundente: El momento de los caballeros ya pasó
. Entonces, los medios redoblaron su derecho a opinar
. Aunque omitiendo, claro está, la opinión que de ellos tiene el líder de la revolución ciudadana
.
En una entrevista concedida al programa Pulso político, Rafael Correa dijo algo que ningún gobernante democrático y moderno
debe decir: La prensa burguesa es el nuevo opio de los pueblos. Desde que se inventó la imprenta, la libertad de prensa no es otra cosa que la opinión del dueño de la misma
(Canal Tc Televisión, Ecuador, 18/5/11).
Tras el dictamen judicial, El Universo sólo publicó en su portada una reflexión de la filósofa
Ayn Rand (1905-82). Autora del libelo anticomunista La rebelión de Atlas (1957), Rand ganó fama de chivata intelectual junto al senador Joseph McCarthy (1908-57), y sus ideas rigen el pensamiento de la ultramontana Fundación Atlas, donde figuran cruzados de la libertad
como Álvaro Vargas Llosa y el terrorista cubano Carlos Alberto Montaner.
Victimizándose, los fieles andinos del periodista
Rupert Murdoch se sumaron al sainete derechista. Los columnistas de El Comercio (Quito) dejaron sus espacios en blanco y el matutino Hoy publicó los suyos en color tenue, insertando una frase patética: ¿Qué pasaría si no pudiera expresar su opinión?
El Departamento de Estado, la Organización de Estados Americanos, Human Rights Watch, el lumpenperiodismo de Reporteros Sin Fronteras y otros sellos que se representan a sí mismos, se sumaron al coro: la libertad de expresión
preocupa en Ecuador.
Atendiendo al terrorismo mediático del big business ecuatoriano, una comisión de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP, encabezada por su presidente, el guatemalteco Gonzalo Marroquín) aterrizó la semana pasada en Quito para conocer in situ la difícil
situación de los medios.
¿Que si en el primer semestre de 2011 fueron asesinados 19 periodistas en 10 países de América Latina? ¿Que la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) aún guarda silencio en relación con los 14 periodistas que en Honduras corrieron igual suerte desde el derrocamiento de Manuel Zelaya (2009)? ¡Asunto de opinión
!
¿Quién es Marroquín? Hace algún tiempo, el periodista guatemalteco Conrado Monroy denunció que el llamado Berlusconi guatemalteco (a causa de sus escándalos públicos y privados) tenía en el periódico que dirigía (el derechista Prensa Libre) un tarifario que regulaba la publicación o no de las noticias, para tergiversarlas o manipularlas.
Marroquín exigió
una audiencia con el presidente. Correa no lo recibió, y puso las cosas en su lugar:
“Aquí hay dignidad y soberanía… Esta gente ha sido vinculada a la CIA. El fundador de la SIP (Jules Dubois) era miembro de la CIA, y su accionar responde a la vieja estrategia que utilizaba Estados Unidos para atacar durante la denominada guerra fría a sus enemigos: los países del bloque socialista. Es un gremio privado.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario