Según el director del Servicio Catalán de la Salud, Josep Maria Padrosa, la Generalitat creará una nueva entidad -cuya forma jurídica aún está por decidir- en la que el IDI mantendrá el 60% del capital y el sector privado el 40%. Esto obligará a modificar los estatutos de esta empresa pública, creada hace 20 años y que tiene 320 empleados. Padrosa explicó que el IDI requiere una fuerte inversión en instrumental, "un esfuerzo que el sector privado puede hacer".
Este anuncio de Salud no se ha librado de la, en ocasiones, errática política de comunicación desde el anuncio de los primeros recortes. El pasado martes, Salud negó reiteradamente a EL PAÍS que estuviera siquiera en estudio la privatización de la actividad del IDI. Ayer, Padrosa admitió lo contrario. Y anoche Salud hizo pública una confusa "nota aclaratoria" en la que negaba estar "negociando la entrada de capital privado" en el IDI y matizaba que "solo estudiará fórmulas de colaboración con el sector tecnológico para la renovación de sus equipos".
Los sindicatos CC OO y SATSE y jefes de radiología de hospitales públicos consultados por este diario ven en esta operación una privatización de CiU y califican la gestión del IDI de modélica. "Logró rebajar el 40% las tarifas que la Generalitat estaba pagando a empresas privadas de radiología", destaca Santiago Marimon, exmiembro del consejo de administración del IDI. Según CC OO, una empresa vinculada a CiU y PP ha mostrado su interés en "convertir en negocio" la radiología del ICS; Padrosa lo negó ayer.
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