Defensor Sporting se consagró bicampeón de la Liga Uruguaya de Basketball tras derrotar a Malvín por 108 a 107 en un infartante tercer juego final disputado en el Cilindro Municipal.
El mejor equipo del año necesitó de todos sus argumentos para completar la barrida sobre el "playero" que estuvo a segundos de extender la serie antes de sucumbir frente al temple violeta.
Diego Castrillón, quién más sino la insignia del club "fusionado", convirtió el triple decisivo que selló el marcador final en un partido que necesitó de alargue para definirse.
on el triunfo, Defensor Sporting se unió a Biguá como una de las dos instituciones que han festejado por partida doble en la Liga.
La emocionante definición era difícil de anticipar cuando en el primer cuarto Malvín abría diez unidades (25-15), su máxima desde aquel juego inicial frustrado por una gotera.
Once puntos de Fernando Martínez y ocho de Nicolás Borselino volcaron la balanza para el lado del "playero" que temprano sentó la tónica dominante del juego, controlando el partido pero sin poder escaparse definitivamente.
Chris Jackson fue el encargado de apagar el incendio para los violetas, que llegaron a bajar la diferencia a seis unidades antes de que una seguidilla de pérdidas -tres en intentos de pases interiores al pívot estadounidense- acabaran con la remontada.
El segundo cuarto fue una sucesión de faltas de ambos lados, en particular de Malvin, las que no permitieron que se repitiera el vértigo del inicio.
Los viajes a la línea terminaron favoreciendo a Defensor Sporting -desde allí Robby Collum, apagado, encontró sus primeros puntos- que volvió a cortar distancias, llegando a ponerse a dos unidades (40 a 42).
Malvín, impulsado por la necesidad de una victoria impostergable, se enfocó en el tercer cuarto y abrió una brecha que fue la máxima, de 13 unidades (63-50), detrás del trabajo de Brian Laing.
Sin embargo, el conjunto de Gerardo Jauri volvió a cerrar mejor el cuarto y se colocó a cinco puntos gracias al primer triple de Collum.
El violeta tuvo a Federico Álvarez como fuente de ofensiva en el período final pero su trabajo pareció ser opacado por un par de triples enormes de Bruno Fittipaldo, ambos en asistencias de Torraye Braggs, que pusieron a Malvín 91 a 85.
Un intercambio de canastas de Braggs y Collum dejó el juego 94 a 91 para el "playero".
En ese escenario se desataron cuatro posesiones claves. La primera, y posiblemente la decisiva, terminó con el interno de Malvín yendo a la línea de libres con 29``8 por jugar. Hasta allí perfecto en libres, pero falló ambos.
El "fusionado" no desaprovechó y Diego González anotó de tres para igualar el juego.
Un rebote ofensivo de Braggs le devolvió la ventaja a Malvín a falta de 2``3, pero el violeta -en una jugada que pareció preparada-, sacó en largo desde debajo de su tabla para que Álvarez, delante de todos y quizás recibiendo falta, anotara el empate que forzó el tiempo extra cuando sólo restaban 0``6 .
El alargue fue más corazón que basquetbol, con muchos jugadores condicionados por problemas de faltas y los libres siendo factor, con Martínez anotando dos importantes para poner a Malvín 107 a 105.
Así quedó la mesa servida para la jugada final, donde el "playero" fracasó en hacerse con el rebote de un triple marrado por Collum y le permitió a Defensor Sporting tener su último intento, ése en el que Castrillón se convirtió en el héroe al conectar desde detrás de los 6,25 y desatar la alegría de la afición "fusionada".
Cuarta barrida en finales
En el corto historial de Liga ya son cuatro las finales con triunfos contundentes. Primero Trouville, luego Biguá dos veces y ahora el violeta.
El arbitraje fue muy malo
La tripleta compuesta por Héctor Uslenghi, Pablo Sosa y Alejandro Sánchez dejó mucho que desear. Fue mala para los dos lados.
Ovación digital
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