"Aún así, hay un artículo en eWeek del mes de julio en el que la
consultora ABI dice que 'el interés del consumidor en los netbooks no
muestra signos de decrecer, y la atracción continua siendo la misma:
buen precio frente a potencia'.
En realidad, el número de netbooks vendidos en 2013 será mucho más cercano a cero que a 139 millones".
La tesis del artículo se apoya en en las últimas decisiones de Asus y Acer -los dos principales fabricantes- de abandonar el mercado de los netbooks. Este año no se venderá prácticamente ninguno y no habrá nuevos modelos. La idea del netbook ha muerto.

Cuando la tableta -entendida como evolución del móvil, no del
PC- apreció en el mercado, el foco de la atención cambió. El netbook
obligaba a lidiar con los sistemas operativos tradicionales, la tableta
ofrecía una experiencia de uso mucho más agradable y sencilla y mayor
autonomía y portabilidad. Para el usuario que sólo quería consultar el
correo o navegar por la web resultaba una proposición mucho más
interesante, aunque fuera unos 100 o 150 dólares más cara. Además,
muchos portátiles "convencionales" comenzaron a rebajar sus precios y la
diferencia con los netbooks ya no resultaba tan evidente.
Como dice Arthur lo más interesante es que el netbook pasó en pocos
años de ser el salvador de la industria del PC a ser prácticamente su
condena. Su aparición en escena obligó a los fabricantes a lanzarse a
una carrera para conseguir el precio más bajo y el margen de beneficio más ajustado que aún está vigente. Intel fue rápida y cambió rápidamente su estrategia para promocionar el concepto de Ultrabook, donde el precio ocupa un papel secundario, pero muchos fabricantes aún se resienten de los años locos del "portátil barato".
No hay comentarios:
Publicar un comentario