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lunes, 19 de noviembre de 2012

El 37% de la población española tendrá más de 65 años en el próximo medio siglo

En el próximo medio siglo, en España vivirá menos gente y será mucho más vieja. Tanto, que nuestro país perderá una décima parte de su población y que el 37% de los habitantes tendrá más de 65 años. Ahora los ancianos representan el 17% del padrón, lo que indica que en las próximas décadas se duplicará este porcentaje.
Lo dicen las proyecciones de población para 2052 que ha realizado, a corto y largo plazo, el Instituto Nacional de Estadística (INE)a partir de la situación demográfica existente.
El organismo público, dependiente del Ministerio de Economía, explica que esta simulación estadística muestra "el efecto que sobre la población futura tendría nuestra presente estructura poblacional y los comportamientos demográficos hoy observados".
Así que, si se mantuvieran en un futuro las actuales tendencias demográficas, tendríamos "un escenario de pérdida progresiva de habitantes en las próximas décadas", advierte el INE.

Menos y mayores

Nuestra población actual , que es de 46,1 millones de habitantes, pasaría a 45 millones (un 2,5% menos) en 2022 y a 41,5 millones (un 10,2% menos) en 2052.
En ese año, los mayores crecimientos de población se concentrarían en las edades avanzadas. Concretamente, el grupo de edad de mayores de 64 años se incrementaría en 7,2 millones de personas (ahora son 8,2 millones) y pasaría a constituir el 37% de la población total (ahora es el 17%).
Por contra, habría menos jóvenes. España perdería casi dos millones de menores de 16 años, un colectivo esencial para nuestro futuro y para pagar las pensiones que ahora lo conforman 7,4 millones de personas.
También se perderían casi 10 millones de habitantes de edades comprendidas entre los 16 y los 64 años, que ahora son el grueso de la población y suponen 31,5 millones.
En otras palabras, si las tendencias y comportamientos demográficos actuales se mantienen, la tasa de dependencia se elevaría hasta el 58%, lo que significa que, en 2022, por cada 10 personas en edad de trabajar, habría en España casi seis potencialmente inactivas (menores de 16 años o mayores de 64 años).
Las cosas serían mucho peor en 40 años, en que la tasa de dependencia se elevaría al 99%, lo que quiere decir que, por cada persona en edad de trabajar prácticamente habría otra que no estaría en edad de hacerlo.

Pocos nacimientos y muchas defunciones

Además, seguiría el paulatino descenso de la natalidad y en 2021 nacerían 375.159 niños, casi un 20% menos que en el último año, al tiempo que continuaría creciendo el número anual de defunciones, debido a "una estructura demográfica cada vez más envejecida". En los próximos 40 años morirían en España unos 17,9 millones de personas, un 34% más que en las últimas cuatro décadas.
A partir de 2018, prevé el INE, habría más defunciones que nacimientos. Es decir, la diferencia entre unos y otros sería negativa, "lo cual aceleraría el declive poblacional".
La esperanza de vida alcanzaría los 86,9 años en los varones y los 90,7 años en las mujeres. Es decir, casi ocho y seis años más que ahora, respectivamente.
Las proyecciones a largo plazo del INE se realizan cada tres años y las proyecciones a corto plazo, de forma anual.

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