Prensa Latina
El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, aguarda esta semana por el fallo de la Corte Constitucional sobre una ley que hasta el momento eximió al gobernante de tres procesos judiciales.
Los magistrados examinarán desde mañana martes la citada legislación, conocida como "de legítimo impedimento", que en 2010 libró al jefe de Gobierno de causas pendientes por soborno y fraude fiscal.
Según fuentes oficiales, el Tribunal emitirá la sentencia a más tardar el jueves y decidirá si la ley que permite a Berlusconi eludir las citas judiciales se ajusta al espíritu y la letra de la carta magna.
De perder la inmunidad, el primer ministro enfrentará la apertura de un proceso por sobornar entre 1997 y 1998 al abogado inglés David Mills para que falsificase su testimonio en dos casos contra él.
Sin su blindaje legal, Il Cavaliere -como es llamado Berlusconi por los medios de prensa locales- también podrá ser juzgado por fraude fiscal debido a la supuesta compra ilegal de derechos televisivos.
El gobernante enfrenta el peor momento de su mandato tras sobrevivir en diciembre pasado a una moción de censura en el Parlamento bicameral que evidenció la frágil minoría con que deberá lidiar en lo adelante.
La actual crisis política que sacude a este país se desencadenó en julio pasado tras la ruptura de Berlusconi con su principal aliado y presidente de la Cámara de Diputados, Gianfranco Fini.
Un mes después Fini fundó un partido, Futuro y Libertad, que amenazó la estabilidad del Gobierno de coalición, enfrentado además a un nuevo escándalo sexual que involucró a Berlusconi con una menor marroquí.
El primer ministro, cuya popularidad ha caído en picada en las últimas semanas, anunció recientemente que si a finales de enero su Ejecutivo no alcanza una amplia mayoría parlamentaria, irá a elecciones anticipadas.
Berlusconi, de 74 años de edad, confió en que de presentarse a comicios adelantados a los de 2013, su Partido del Pueblo de la Libertad obtendrá de nuevo la mayoría en la Cámara Baja y en el Senado.
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