.

.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

El cura acusado de pedofilia: 'No era consciente de que fuera un gran delito'

El ex párroco de la localidad castellonense de Vilafamés imputado por un presunto delito de distribución de pornografía infantil ha roto su silencio para asegurar que "no era consciente de que era un delito tan grande".

[foto de la noticia]

Confinado en un convento desde que se destapara su detención, el todavía sacerdote Rafael Sansó Riera responde a la llamada de EL MUNDO no sin cierta reticencia para abordar un tema "delicado" que prefiere tratar a través de su abogado.

Tras haber confesado su culpabilidad ante el juez y el Obispado, Rafael Sansó afirma que ha puesto su futuro como sacerdote "en manos de la Iglesia y de los rangos superiores". No contempla en cambio apartarse de la Iglesia porque, "una cosa es apartarse de la Iglesia y otra es ejercer como sacerdote", matiza.

Pero además Rafael Sansó no duda en asegurar que está "a disposición de la Justicia", ante la que ya ha declarado y deberá responder cada quince días después de que fuera detenido el pasado miércoles en el marco de una operación internacional para desmantelar una red de distribución de material pedófilo por internet y en la que le intervinieron 21.000 archivos de pornografía infantil.

Ante la Iglesia y ante Dios respondió por primera vez tras prestar declaración judicial. "Lo primero que hice nada más salir del juzgado fue confesarme", revela, para comentar que ha buscado el perdón de "la Iglesia, de la parroquia y de las personas a las que he podido ofender".

El sacerdote también ha pedido el amparo del Obispado y lo ha obtenido, según afirma, ya que dice sentirse "totalmente respaldado" por la Diócesis de Segorbe-Castellón, que le ha dado apoyo jurídico y psicológico. Del obispo castellonense, Casimiro López Llorente, asegura con solemnidad que "se ha portado como un padre" y ante la pregunta de si le ha dado el perdón, responde un tajante "por supuesto", al igual que muchos feligreses allegados, dice.

En cambio, en Vilafamés, aún conmocionados con lo sucedido, las opiniones son dispares. La mayoría de los vecinos, según explica la alcaldesa, Luisa Oliver, se sienten decepcionados ante lo que consideran una 'doble vida' del sacerdote, que mostraba un gran "desafecto hacia los niños".

De nuevo pide perdón a quien haya podido "ofender" y se asila en un convento, al parecer cercano a su localidad natal, Manacor.

Sansó volverá a comparecer ante la justicia quincenalmente, según la orden de la juez que le dejó en libertad provisional.

No hay comentarios: